Capilla Sixtina 2

Por León Reyes Castro

Antes de ingresar te ponen un video representando la relación de Miguel Ángel con los papas que reinaron durante los trabajos del pintor en la Sixtina, la concepción y ejecución del proyecto.

Muy bien, aunque breve, elaborado, sólo que el actor que representa a Miguel Ángel, nos lo pusieron muy guapo, cuando es sabido que la fealdad del dDivino era de destacarse.

Ingreso a un espacio escasamente iluminado y lo primero que veo es el piso, me llama la atención, que es muy semejante al del video, de pronto, al tiempo que inicia una narración, se ilumina el espacio y el mundo cambia, nunca imaginé lo que me esperaba: la Capilla Sixtina, estoy en una réplica de la Sixtina, no la he visitado por la sencilla razón de que nunca he estado en Roma.

Todo lo que había visto de este monumento eran parcialidades, aquí la veo en su integralidad, me doy cuenta, más por la narración que por mi vista, que está diseñada en espacios en los que separadamente representan pasajes bíblicos, yo la imaginaba como un todo, sin interrupciones, al frente de la capilla un impresionante mural sobre el juicio final, este sí es un pasaje sin espacios libres de pintura.

Como todo lo de Miguel Ángel, un impresionante conocimiento de la anatomía humana, los músculos de las figuras siempre definidos, posiblemente por la técnica usada, fresco, no destacan los colores; podría seguir describiendo mis sensaciones, pero no es lo que me interesa destacar en éste texto.

Lo que quiero destacar es el trabajo de la réplica y el tiempo empleado.

Lamentablemente no hay folletos o literatura a la venta que expliquen e informen del tema, así que me aproximo a una persona que por su vestimenta me parece puede darme datos.

Me comenta que la ejecución del proyecto duró tres años, se inició en Roma con la toma de fotografías en la Sixtina, después ya en México se produjo todo el material de la réplica, el trabajo, es extraordinario.

No saben informarme si lo hicieron mexicanos, pero sales del espacio, con cara de ¡¡¡¡ Wuauu!!!

Me quedo con la sensación de que ya estuve en la Capilla Sixtina.

Si tienen una lanita, para ir a la Ciudad de México lléguenle, hay exposiciones interesantes, es temporada de chiles en nogada y de escamoles, el tráfico entre más viejo, más te molesta y con el güey de Nuño, que tiene a un madral de profes en la calle y los taxistas que siempre te joden sientes que estás en el infierno, pero a pesar de todo, México es México.

Regreso medio tristón, como siempre, fui al Munal a ver y disfrutar de mis mujeres, no las pude ver, las tenían guardadas, están en bodega quien sabe por qué.

Desesperanza y a pesar de todo, siguen siendo mis amores, se que nunca las perderé.