La Fuente

*Hierve guerra entre poderes *Amparos contra decretos *El alcalde del pistolón *Reyes en el senado

  • Por José Oswaldo
*Hierve guerra entre poderes *Amparos contra decretos *El alcalde del pistolón *Reyes en el senado

LA guerra entre poderes subió muchos decibeles al aprobar el congreso vía fast track la reforma y Gabriel Sepúlveda pedir amparo ante la justicia federal. Si las cosas son como luego se dicen, este mismo viernes aparecerá un extra-extra del Periódico Oficial del estado. Así, se publicará de inmediato el decreto, concluiría el período de Sepúlveda al frente del TSJ y entraría Julio César Jiménez Castro (vino, vidi, vinci, dicen que dijo) al frente. Falta todavía saber, ya para infartarse de emoción jurídica y periodística, si el Juez Primero de Distrito, Juan Antonio Trejo Espinoza, concede la suspensión provisional. La moneda está en el aire, pero la mano que la dejará caer ya no es de nivel estatal sino federal. Sepúlveda y su gente se pusieron las pilas y sólo con la votación -no esperaron la publicación del decreto- tramitaron el amparo ante la inminencia de su destitución. La irretroactividad de la ley, la invasión de poderes, el ataque a la autonomía e independencia del poder judicial y, sobretodo, eso de que le construyeron una ley especial y privativa, como en los tiempos de la revolución, constituyen los principales conceptos de violación del amparo de Sepúlveda. Hoy, tirios y troyanos, estarán pegados a la página de la SCJN para saber, en el apartado de listas, si aparece la palabra se concede, o se niega, la suspensión en el juicio de garantías, porque eso será vital para el desarrollo de todo el proceso.

FERNANDO Álvarez Monge tiene entre sus manos el primer problema político serio qué resolver. El alcalde de Nuevo Casas Grandes, doctor David Martínez Garrido, tiene una gran afición por las armas de fuego. Es el edil que era priísta y se pasó a las filas del PAN y le ganó la elección a su verdadero rival que era el ex diputado Javier Mendoza, del PRD. Pues bien, un grupo de panistas, liderados por el presidente del comité municipal, fueron a su despacho a dialogar con el edil. En pocas palabras, le dijeron que no veían, por ningún lado, albiazules en la alcaldía de Nuevo Casas Grandes. El doctor Martínez Garrido les respondió sacando una magnum 357 de su cintura y colocando el pistolón sobre el escritorio, en medio de gran ruidajo. Los panistas salieron con la cola entre las patas de la presidencia municipal y, de inmediato, le llamaron al Presidente del CDE para exponerle la situación. Álvarez Monge calló boca y, seguramente, esperará a comentar el asunto en palacio antes de tomar cualquier decisión. La bronca no es nada sencilla, pues apenas ha transcurrido un mes desde que rindieron protesta los nuevos ediles y a este breve paso del tiempo surgió ya un gran problema para el líder estatal albiazul.

LE fue bien a Reyes Baeza en el senado de la república al comparecer ante la comisión de salud. El director del Issste destacó que las pensiones están garantizadas, que estados morosos deberán pagar sus cuotas, que hay avances significativos en la prevención del cáncer de mama y que en breve la institución contará con la Fundación Issste. El senador Francisco Salvador Brito, presidente de la comisión de salud, dirigió la sesión con tino y reconoció la labor del funcionario federal. Estuvieron presentes los senadores Lilia Merodio, Patricio Martínez, Hilda Ceballos, Rocío Pineda, Cristina Díaz, Anabel Acosta, Fernando Mayans, María Elena Barrera y otros más. Entre sus colaboradores se vieron Lupita Chacón, Minerva Castillo y Susana Rodríguez y otros, y como invitado anduvo Memo Márquez, a quien le preguntaron qué andaba haciendo y se limitó a responder que lo habían invitado. De inmediato, las especulaciones hicieron subir a la lista de los aspirantes a Márquez. Memo ya fue pero anda en la banca y dirigir el CDE del PRI no es nada despreciable en estos momentos de crisis política. La dificultad estriba en conseguir el apoyo de Reyes Baeza, seguramente.

EL Miguelón Latorre, lo que sea de cada quien, se aventó una buena faena tras bambalinas en la torre legislativa. Necesitaba un voto para sumarlo a los 16 del PAN y aprobar la Ley Sepúlveda, pero rompió todas las expectativas y alcanzó los 23 votitos. Es decir, consiguió, bajo las reglas de la negocia, siete votos no azules, para la causa azul. René Frías, por ejemplo, entregó los tres del Partido Nueva Alianza, tras convencer de las bondades de ello al maestro Juan Díaz de la Torre, líder nacional del SNTE. Leticia Ortega y Pedro Torres, de Morena, se salieron del guacal y también votaron a favor de la reforma. Movimiento Ciudadano, con Miguel Vallejo e Israel Fierro, el pez de Encuentro Social, se pusieron en la fila, de la misma manera. Los diez votos en contra fueron de las cinco diputadas del PRI, Karina Velázquez, Adriana Fuentes, Isela Torres, Imelda Beltrán Anaya y Rocío Grisel Saénz, así como los dos del Verde, Alejandro Gloria y Ever Quezada, sumados a los dos del PT, Rubén Aguilar y Héctor Vega, más el de la perredista Crystal Tovar, que está dando la sorpresa legislativa.

NADIE sabe, nadie supo, pero los dos diputados de Morena, aseguran en la torre legislativa, hicieron acuerdo con el PAN. Los que saben de asuntos legislativos, cuentan a Leticia Ortega Máynez y Pedro Torres Estrada, como votos oficialistas en el congreso. Algunos aseguran que todo ocurrió en Michoacán, en donde Blanca Gámez dio instrucciones de traer de la mano a ambos legisladores. El asunto suena hueco, medio raro, por la conocida posición de Andrés Manuel López Obrador respecto del PAN en Chihuahua. El Peje fustigó a Víctor Quintana por irse al gobierno de El Paisa, al señalar que tenía una enfermedad que sólo se cura con el hueso. Y acusó al gobernador de ser parte del acuerdo cupular, nacional, en el sentido de sólo perseguir a los ex gobernadores Javier Duarte y Guillermo Padrés, del PRI y del PAN, en el tema de la corrupción. Por eso, que los diputados de morena hagan aquí alianza con los panistas, pues como que suena raro, pero, en fin, como dijo el maestro, por sus obras los conoceréis y eso se verá más pronto que tarde.

POR si alguien tenía duda sobre el proyecto legislativo del actual régimen en gobierno del estado, una foto y un video aclaran la cosa. En la foto, aparecen el magistrado Julio César Jiménez Castro y Miguel Latorre, coordinador de la fracción parlamentaria de acción nacional. Por el momento y el contexto, no es necesario preguntar con quien fueron, ni tampoco es necesario indagar cuál es el tema que seguramente se trató en esa visita. Las reglas de la política son las mismas para todos los partidos o grupos en el poder. El ejercicio de este último, requiere que el gobernante tenga carro completo para poder sacar adelante su proyecto. Es decir, contar con los otros dos poderes, el legislativo y el judicial, para que el ejecutivo desarrolle sus planes con un mismo rumbo. Jiménez Castro, como ya se ha señalado, parece ser que será el ungido para presidir el poder judicial si entra en vigor el transitorio el próximo sábado. Su parentesco con Marcos Molina, asesor jurídico del ejecutivo y amigo del gobernador, además de si abierta militancia azul y oposición a los gobiernos priistas, aunado a que ya es jubilable, le hicieron merecedor de ser propuesto como cabeza del TSJ. Todo parece ser normal, excepto las críticas vertidas al antecesor, por su cercanía con el titular del poder ejecutivo del estado, lo cual produce la idea de, ciertamente, no ser distinto a los otros, sino, contradictoriamente, iguales.