Opinión

La columna

  • Por Cynthia
La columna

* La foto de Jaime García Chávez: ¿reverencia o reclamo?

* La relación Reyes Baeza - Javier Corral: punto y aparte.

* Adriana Fuentes y Laura Domínguez: ¿El PRI las prepara para ir por Juárez?

* El “Vive Bus”: una enseñanza y una expectativa.

Llamó la atención en días recientes la repentina publicación en un importante medio digital de una fotografía en la que Jaime García Chávez -abogado, ex legislador, excompañero de causas socio-políticas y amigo personal del gobernador Javier Coral-, aparece sentado frente a la puerta principal del Palacio del Gobierno del Estado. Según fuentes bien informadas, la fotografía fue tomada el 4 de octubre del presente año, al momento en el que Javier Corral tomaba formalmente el cargo de Gobernador de Chihuahua. ¿Tiene algún mensaje la foto?. Por supuesto que sí. ¿Sabía de ello el Gobernador Corral, es decir, le consultó o avisó previamente García Chávez?: sólo ellos dos lo saben. Lo cierto es que algo se pretende con tal acción, pues luego de la estratégica separación formal de Corral respecto a la asociación civil Unión Ciudadana, que ambos actores cofundaron, y ante la aparente exclusión de García Chávez de la nómina estatal, surgen interrogantes. ¿La voluntaria y premeditada pose fotográfica del conocido jurisconsulto en el palacio fue un reclamo para recordarle a su amigo y camarada el gobernador, que él también quiere estar oficialmente en el escaparate público? o ¿es simplemente un gesto reivindicador de lealtad y reverencia?

Es un hecho que tanto el gobernador Javier Corral como el exgobernador Reyes Baeza saben conducir su relación diplomática al margen de sus respectivos compromisos partidistas, así como de las posturas de sus correligionarios de uno y otro bando. Controlar todas las acciones “fuertes” de las huestes del Revolucionario Institucional no es tarea fácil para el exmandatario de origen deliciense, y menos cuando la artillería proviene de actores VIP política y socialmente importantes, como es el caso del exdirigente estatal tricolor y actual diputado federal de las mismas tonalidades, Alejandro Domínguez. Resulta que con los jaloneos mediáticos en torno a la escasa partida federal de recursos financieros extraordinarios asignados a Chihuahua, el legislador salió a refutarle al “góber”, afirmando que la razón del menguado aporte de una cantidad de centenas de millones de pesos considerablemente inferior a la originalmente pretendida, se debió a la deficiente y tardía integración de expedientes por parte del gobierno estatal, lo cual evidentemente “calentó y recalentó la plaza”, y sobre todo a la raza de palacio. Como Baeza y Corral -con su propio estilo cada uno- son políticos de carrera, y a estas alturas de la vida ya no se cocen al primer hervor, actuarán con amplio criterio y madurez para mantener cordial su relación. Por ello lo que pase en sus cuarteles políticos, lo seguirán considerando -hasta donde les sea posible- punto y aparte.

La inauguración de una oficina fronteriza de enlace legislativo y atención a la ciudadanía, que con el eslogan “Una voz de soluciones”, recientemente llevó a cabo la diputada tricolor juarense Adriana Fuentes, dio qué decir en algunos medios, y desde luego también al interior del Partido Revolucionario Institucional. Aunque la apertura de tales instancias de vinculación ciudadana es ya una costumbre normal que practican los legisladores de todos los partidos, en aras de atender su compromiso político y social con los ciudadanos que los eligieron, tales acciones, quiérase o no, siempre tienen un dividendo de carácter político. Lo anterior viene a colación porque, siendo como lo es la actual época, una etapa histórica en la que son reales tanto el empoderamiento político electoral de las mujeres, como su igualdad jurídica respecto a los hombres en la competencia por las candidaturas a los puestos de elección popular, la iniciativa desplegada en ciudad Juárez por la conocida representante popular de esa frontera podría estar encaminada hacia la búsqueda de la alcaldía de ese importante municipio. Como en las últimas semanas se ha venido rumorando que la misma pretensión política también podría estar animando a la exdiputada Laura Domínguez, para ir en pos del honroso puesto que ahora ocupa el alcalde independiente Armando Cabada, surgen las preguntas: ¿Ambas féminas políticas de sangre priísta irán por la Presidencia Municipal de Juárez, en el año 2018?, ¿Su aspiración conjunta es, además de un anhelo real, una estrategia del PRI, por aquello de que llegado el momento es mejor tener una amplia y bien “maiceada” caballada, en lugar de andar dando lástimas?

A propósito del Sistema de Transporte Colectivo de la capital del Estado de Chihuahua, denominado “Vive Bus”, y con el fin de citar algunas observaciones que respecto a dicho servicio ha hecho el licenciado Roberto Alejo, es pertinente referir que a juicio de este profesionista, la política que ese medio de transporte ha implementado al reservar asientos preferenciales para mujeres embarazadas y personas adultas mayores o con discapacidad, deja una positiva enseñanza, pues ha contribuido a hacer que retornen en la actitud de muchos pasajeros chihuahuenses esos buenos modos y costumbres que antaño nuestros padres y abuelos nos enseñaron para que los hombres cediéramos los asientos tanto a las personas con limitaciones físicas, así como a las damas y las personas de mayor edad. Por lo que concierne a la expectativa que en Roberto Alejo genera el “Vive Bus”, hay que mencionar la conveniencia de que se analice la posibilidad de destinar unidades especiales para el traslado de estudiantes y personal al Campus I de la UACH, ya que el abordaje de estos usuarios en las horas “pico” satura las unidades disponibles, ocasionando incómodas demoras a otros pasajeros, por la espera que éstos deben realizar para abordar el autobús.