*Se insurrecciona diputado vs el PRI *Registra planilla paralela a la oficial *El Charro Azul de la CTM *Álvarez Ponches, otro nepote

ALEJANDRO Domínguez comentó que más vale morir en la raya que no intentar hacer las cosas de otra manera. La negativa de los líderes priístas a dialogar -presidente, delegado, ex gobernadores, senadores, excepto Chela Ortiz- forzó el registro de la planilla rebelde. En respuesta, se dijeron dos cosas: primero, que el diputado representaba la voz de Duarte. Segundo, que había traicionado al tricolor y que había negociado con El Paisa para acabar de exterminar lo poco que queda del PRI. El más objetivo de todos fue El Coco Reyes, sin lugar a dudas. Leonel dijo que estaba más fácil refundar al ex partidazo que integrar una planilla para renovar el consejo político nacional. Al Alex D lo calificaron de traidor, además, por haber ido al desfile del Primero de Mayo y marchar con Corral. En respuesta, dijo que andaba con Pancho Salcido y que era el único que le ha pegado a la administración del nuevo amanecer. De rebote, de allá del Defectuoso, se hizo saber que César Camacho bufaba de ira por la conducta política de su tocayo local. Se lo hizo saber Fernando Uriarte, el coordinador de la fracción chihuahuita, pero la respuesta fue que su cargo no le alcanza para meterse en la militancia del legislador. Total, que las cosas se pusieron al dos por uno y, obvio, habrá consecuencias políticas, de las buenas.

PARA ser exactos, a la una y media de la madrugada, se rompió la liga entre el delegado y el diputado. Fernando Moreno Peña y Alejandro Domínguez, discutieron hasta el cansancio. El tema, obviamente, era la integración de la planilla del consejo político estatal. Moreno Peña tenía ya, entre sus manos, la que podría ser la oficial, estructurada a base de cuotas grupales y espacios otorgados a líderes. Domínguez, apoyado por Alex Lebarón, diputado federal, Rocío Sáenz, diputada local, Lucía Chavira, delegada de Sedatu, Heliodoro Araiza, Miguel Ángel González y, otros más, decidió insurreccionarse, rebelarse al oficialismo y registrar la propia. No se pudieron poner de acuerdo en los 300 lugares de la militancia. Es decir, en la mitad del consejo, pues la otra mitad es destinada a grupos y personajes. Don Ramiro Cota Martínez, el presidente de la comisión de procesos internos, tiene en su escritorio los documentos de las dos planillas. Este miércoles, deberá resolver si las admite o no y, en su caso, verter las razones de una probable negativa.

MUY, pero muy comentadas, las fotografías de El Paisa, tomado del brazo de Doroteo Zapata, durante el desfile del primero de mayo. Primero fue en la rotonda, cuna de la clásica y tradicional ofrenda floral, antes de la marcha de los contingentes. Después, en el trayecto, por la calle Aldama, Corral volvió a colgarse del brazo del dirigente cetemista. Una de las fotos desató la ira del abogado Jaime García Chávez, que no apareció por el desfile. Llamó El Charro Azul a Doroteo Zapata e, indirectamente, criticó al titular por la desfachatez de unirse a quien ha sido un tirano de los trabajadores, según su óptica política. Las imágenes circularon ampliamente por las redes y los medios y causaron comentarios de todo tipo. Más tarde, dicen los que saben, a El Paisa le temblaba la mano al firmar el pliego petitorio que le entregó en la mano Rosy Hernández, secretaria general de la sección octava. Corral sintió, en el desfile, el power de los trabajadores organizados, que tradicionalmente han jalado con el PRI, pero que, ahora, andan buscando escuchar el cencerro que les muestre el camino.

PARA no quedarse atrás en el tema del nepotismo legaloide, el dirigente estatal del PAN le entró con gusto al baile. Su hermana, María Eugenia Álvarez Monge, labora en el DIF estatal como Coordinadora de Esparcimiento. Ya se sabe que, en el nuevo amanecer, no existe el nepotismo como tal. Ellos los meten, pero no los contratan, aunque antes esa sola figura motivaba que despotricaran contra los demás. Fernando Álvarez Monge, obviamente, tuvo que ver en la contratación de su hermana en el DIF estatal que preside Cinthia Chavira. Es la hermana del Presidente del Comité Directivo Estatal de Acción Nacional. Seguramente, dirán que no es cierto, que no se infringe la ley y que no hay ahí nepotismo. Empero, sin lugar a dudas, hubo influyentismo, para que ella y cientos de nuevos burócratas, fueran contratados. Los únicos que se salvan, son aquellos que ya laboraban, previamente al ingreso de su familiar. Pero tampoco la libran aquellos que ya tenían su cargo y, al entrar el familiar, son repentinamente ascendidos. Se quejaban de esto en la figura de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia, pero, muy pronto emularon la falla y la remasterizaron, con justificaciones legales y morales que a la ciudadanía ni al caso.

EL alcalde Armando Cabada estará el jueves con los miembros de la Junta de Coordinación Política. Obviamente, el tema será el de explicar a los diputados de este órgano, el proyecto de alumbrado público en la frontera. Son 1,500 mdp, los que cuesta el proyecto, por lo cual los legisladores quieren estar enterados de cerca. La reunión se efectuará a las nueve horas y estrenará al nuevo coordinador de la fracción parlamentaria del PAN, el tremendo Jéchu Villarreal. Ya el cabildo fronterizo aprobó el plan y, sigue ahora, de acuerdo con las etapas, cabildear ante los diputados locales. El que la trae contra Cabada es el diputado Pedro Torres Estrada, el moreno azulado, o azul moreno, autor de la llamada a comparecer. Cabada deberá exponer, en primer término, cuál es el estado de cosas, actualmente, en materia de alumbrado público. Y, enseguida, analizar, punto por punto, el nuevo proyecto para llevar luz a las cientos de colonias desprotegidas que hay, ciertamente, en Ciudad Juárez. Cabada hará un pisa-y-corre, pues apenas salga del congreso, se irá a Ciudad Juárez, a seguir con el desahogo de su agenda.

EL problema de la planilla de Alejandro D es que se repiten nombres en el tema de los candidatos estatutarios y los candidatos de la militancia. Los 12 alcaldes que puso Lebaron entran ipso facto, en automático, sin necesidad de ser propuestos, en razón de su encargo. Sin embargo, además, firmaron como candidatos por la militancia, con lo cual duplicaron sus nombres. Así hay más casos, dicen, que seguramente no pasarán por el cedazo que traen Don Ramiro Cota y Normando Perales. Ambos son exegéticos cuando de aplicar normas se trata. En la mañana del martes desayunaron en La Casona Alex D, Lucía Chavira, Miguel Ángel González, Rocío González y Fernando Mendoza. Después se hizo el despapaye y el registro de la planilla B. Por eso, los que saben, dicen que se mira, con toda claridad, la mano de Marco Quezada, en el último intento por quedarse en el PRI. Lo demás, constituye un pequeño salto, pues habrá pretexto y proyecto para el cambio.