*El face de la consejería jurídica *Los guarros de Armandito *Rudeza innecesaria en el Cobach *El paro de los celadores

MACLOVIO Herrera, dicen, debería amarrar a sus perros, o cuando menos, ponerles bozal, para que no muerdan cuando anden en la calle. Es que, uno de ellos, de nombre Pedro Olivas Jiménez, anda echando a perder el prestigio de la consejería jurídica y del estado. Y sin tomar en cuenta su obligación como servidor público, batió con el principio de presunción de inocencia al por mayor. Oliva publicó en su face una foto de varios ex funcionarios con subrayados agraviantes. No es que exista una defensa generalizada de estos personajes, sino que tampoco debe efectuarse una condena pública en general. Más cuando se trata de funcionarios públicos que están obligados a guardar la compostura por ministerio de ley. Puro delincuente en esta foto, ni uno se salva, nada que al final nos rompimos las medias y ya me hice santo, los siete van a ir al bote. El tema es que el abogado de Maclovio muestra ignorancia supina al generalizar así, pues cualquier chihuahuense con tres dedos en la frente sabe quién es quién en ese tema. En la imagen aparecen Duarte, Everardo Medina, Gabriel Sepúlveda, Javier Garfio, José Miguel Salcido, Enrique Serrano y Teto Murguía.

QUE buen relajo se armó en la nunca bien ponderada y heroica Ciudad Juárez, al mando hoy de Armandito Cabada, el junior de la TV. Se encerró a piedra y lodo en su oficina, con el comité de adquisiciones del ayuntamiento fronterizo. Claro, el tema era, obviamente, El asunto de las luminarias, sobre las cuales descansa la reelección de Armandito. No permitió entrar a la reunión al síndico Aarón Yáñez, quien ni con su charola pudo convencer a los guarros de que le abrieran el paso. Tampoco pudieron entrar dos regidoras del PRI a la reunión, a pesar que mostraron sendos escritos donde cabildo autorizó su ingreso. El acuerdo consistía en que podrían hacer uso de la voz pero no del voto, pero ni así materializaron su objetivo. Los guarros de Armandito, que no son muy bien portaditos que se diga, se encargaron de hacer cumplir las órdenes del alcalde.

ES innecesario, cerca de lo inhumano, mantener esa situación que hoy priva en el Colegio de Bachilleres. Tampoco, la verdad de las cosas, tiene tanta necesidad Teresa Ortuño de soportar tal humillación. El jueves fue el colmo, pues mientras hablaba en un evento de graduación del bachilleres, los graduandos le voltearon la espalda. La responsabilidad no es ya de ella, sino de sus patrocinadores en el cargo, que tienen la obligación de velar por la cosa pública. La respuesta machista del secretario general de gobierno, que solo alude a no perder el juego de vencidas, habla muy claro de la concepción que se tiene del ejercicio de gobierno. El tema aquí es que han dejado correr tanto las cosas que se han agravado en extremo. Ciertamente, el estado se puede montar en su macho, como refiere César J y dejar en su cargo a Ortuño los cinco años. Sin embargo, estaría sin márgenes, sin brazos, sin piernas, sin movilidad, en una especie de zona de guerra. La batalla en el terreno ya la perdió y a tal grado privan las cosas que la situación amenaza con desbordarse. Debe haber cordura en algún lado, pero, evidentemente, no la hallarán en la secretaria general de gobierno, donde dictaron sentencia absolutoria en forma anticipada.

LOS celadores, custodios y administrativos del cereso, tronaron, así de simple, por las promesas incumplidas. Apenas el miércoles pasado, El Paisa les soltó un prolongado discurso plagado de promesas. El nombre del evento estaba más largo que la cuaresma: Programa de Fortalecimiento Policial y Personal Sustantivo de la Fiscalía General de Justicia en la ciudad de Chihuahua. Bueno, pues con todo y ese infinito -y más allá- de palabras y promesas, en la quincena no llegó nada. Así que, simple y sencillamente, explotaron los trabajadores del cereso e hicieron valer sus derechos laborales ante las promesas fallidas. El propio Paisa hizo los siguientes compromisos: 1.- Incremento y homologación salarial promedio (sic) del 15 al 28 por ciento para el personal de seguridad pública, peritos, agentes del ministerio público y personal de custodia 2.- Créditos para vivienda 3.- Seguro de vida 3.- Acceso a servicio médico 4.- Seguro de Separación Individualizada 5.- Becas para los hijos 6.- Servicio Profesional de Carrera 7.- Concurso de ascenso anual. Pues nada de esto llegó en el cheque quincenal, así que las cosas se pusieron del cocol. Y falta que bajen de la sierra los policías estatales que andan que les hierve el alma por la falta de apoyos.

FERMINE Ordóñez no le entró al llamado de la senadora Lilia Merodio para insurreccionarse. Aunque tampoco rompió el diálogo, pues habla con todos los grupos priístas, así que siguió en la línea de batalla. Ayer se reunió con Don Fernandone Baeza, el ex gobernador que regresó y se reintegró ya a la política local. Duraron en La Casona del centro (la otra es La Casona La Nour, en el distrito 1) más o menos una hora. Fernandone es cauto, prudente y, por su experiencia, toma las cosas a distancia. Sin embargo, aunque haya dejado el bastón de mando del grupo a su sobrino Reyes, es la voz de la experiencia y la trayectoria política. Ha asistido a las reuniones en el comité ejecutivo nacional del PRI y a las propias de Chihuahua. No ha manifestado, en absoluto, tener aspiración alguna, ni para el 2018 ni para otro proceso. Todo parece indicar que su proyecto contempla estar en Chihuahua tranquilamente. Tal vez podría apoyar a alguno del clan que traiga aspiración con posibilidades. Don Fernandone externó su postura de unidad en torno a la sucesión en el PRI estatal, como un requisito contextual, por el momento que se vive. El diálogo entre Fermín y Fernando fue provechoso, pues se dio un puente entre la experiencia y la juventud política.