La Fuente

*Duermen parados internos del módulo 5 por castigo *El Reptore se embuchaca 2 mdp *El otro retén

  • Por EditoraSD
*Duermen parados internos del módulo 5 por castigo *El Reptore se embuchaca 2 mdp *El otro retén

LOS internos castigados después de la fiesta del jefazo del módulo 5 siguen en alta seguridad. Algunos de ellos, sin deberla ni temerla, están pagando los costos del pachangón que hubo. Lo peor del caso es que, dicen los que saben, en el área donde yacen castigados, no caben. Deben estar parados por lo reducido del espacio y turnarse para dormitar a ratos, pues solo dos o tres pueden estar tirados en el piso. Desde hace nueve o diez días, han estado así, de acuerdo con la versión de quienes tienen acceso al área. Obviamente, no les han permitido ver a sus familias y no han visto la luz del día en todo ese tiempo. Y no es que los castiguen por la fiesta sino por haberla terminado en un pleitazo que alertó a los medios. Así que, ni hablar, será hasta la próxima semana qué tal vez salgan de alta seguridad y puedan reconocer el sol de nuevo.

LAS Águilas de la Uach perdieron estrepitosamente frente a los burros blancos del Politécnico. Imagínese usted, cómo andarán las cosas, que el marcador final fue de 42-14 a favor del poli. El tema, nuevamente, es que los de la universidad carecen absolutamente de apoyo oficial. Nadie sabe, la verdad de las cosas, a donde se va el recurso económico de la mínima casa de estudios en ese renglón. El coach Erik Vargas anda que no le calienta el Sol y no sabe qué decir sobre este asunto a los jugadores. Y Hans Flores Porras, el coordinador de Actividades Deportivas de la Uach, pues sigue con la cabeza metida en un hoyo, como los avestruces. Y ni qué decir del reptante reptor, al que nada le interesa el deporte, obvio, y no se ha dignado a recibir a los jugadores para escuchar de su propia boca la situación que prevalece. En fin, el descalabro que sufrieron Las Águilas este sábado, dicen, es el mayor que se ha registrado en los últimos 20 años.

A unos cuantos metros del retén militar del kilómetro 100 de la carretera a Juárez, fue instalado un punto de la revisión de la Policía Federal. El hecho llama mucho la atención porque no es comprensible, para el ciudadano, que apenas brinque el retén de los soldados y aparezca otro. El viajero es sometido a una revisión del ejército y enseguida, apenas a cinco metros de distancia, nuevamente es sometido a otra, por los policías federales. El hecho recuerda aquellos años idos del 2006 al 2012, cuando existía una alta desconfianza entre las instituciones de seguridad. Con Felipe Calderón, se hizo a un lado el ejército y las instituciones, para dar paso al relieve de la Marina. Como sea, el asunto toma nuevamente una dimensión trascendente, porque pone de manifiesto las relaciones inter institucionales y, a la vez, exhibe el impacto que recae sobre los ciudadanos este tipo de medidas.

AL Reptor Luis Fierro se le adelantaron y le crearon ya un observatorio ciudadano al interior del campus universitario. Lo más interesante es que este observatorio empezó con un estudio sobre las percepciones de primer nivel de los funcionarios de la Uach, incluído Luisito Fierro, El Parientón, por ejemplo, El Reptore, gana la friolera cantidad de 149 mil 570 pesos, la cual, sumada a su aguinaldo, le pega a los dos millones de pesos en forma anual. Es mucho dinero para un funcionario que le pide dinero a los partidos políticos y que se queja de que la universidad carece de recursos para cumplir bien su función. El primer informe de El Reptore estuvo basado no en obras y acciones realizadas, sino en promesas, como si todavía no ocupara el cargo. De ahí para abajo, los sueldos son similares, pero llama más la atención el de El Parientón, debido a la verborrea que le caracteriza al abordar temas de la mínima casa de estudios.

HAY que decir que no están considerados los gastos por pagos de celulares, gasolina, mantenimiento vehicular, mantenimiento de vehículos para uso personal. En este último punto, el observatorio ciudadano, formado por distinguidos universitarios, abre un paréntesis. Es que, aunque los vehículos de la Uach son utilitarios, son usados por El Reptor y sus secuaces, para salir de vacaciones, días festivos, compras de fin de semana, compras en El Paso, fines de semana, y para traslados de amigos y familiares. Tampoco está considerado el pago de secretarios técnicos y privados, gastos de representación, gastos de mantenimiento en sus casas particulares, y en algunos casos hasta de sus oficinas privadas. Todos estos gastos, deberían ser incluidos, en realidad, como parte de los ingresos de algunos funcionarios, porque deberían ser pagados, simple y llanamente, de su bolsa. En contraparte, El Parientón mantiene hundida a la universidad, en una de sus peores épocas, sin crecimiento ni proyección, sin rumbo ni proyecto, allanado y rendido a los pies de palacio como nunca antes había hecho rector alguno, inmovilizado por la mediocridad.