Opinión

Espresso Doble: “Morena: ¿Toño o Tiscareño?

  • Por editor TV
Espresso Doble: “Morena: ¿Toño o Tiscareño?

Por Luis Rubén Maldonado Alvídrez 

 

México es un país con una sólida tradición cafetera. Sin embargo, el 2 de febrero, los mexicanos dejamos de lado el café. Lo cambiamos por atole para acompañar los tamales de este tradicional festejo.

La consultora Kantar Worldpanel realizó un estudio sobre el consumo de tamales con motivo de las celebraciones del 2 de febrero y encontró que 45% de las veces que se consume este alimento en el país se relaciona con la búsqueda de antojo o placer, seguido de 8% vinculado a ocasiones especiales y 6% por la conveniencia de ser consumido de forma rápida. Algo similar sucede con el atole, su consumo principalmente es por antojo, mientras que un 6% de las veces es porque se busca una opción diferente, el 4% es por una ocasión especial y el 20% de las veces que se consume a esta dupla (atole y tamal) es simplemente porque les gusta su sabor, según la firma.

Pero un buen espresso también marida bien con unos tamales dulces. Recuerde que tiene que ser caliente al tacto, amargo al paladar, fuerte en la nariz yescaso al servirse.

Y para emociones fuertes, pídalo doble.

Comenzamos el espresso doble de hoy.

Caliente. El partido de Andrés Manuel López Obrador está en mas definiciones de sus candidaturas a puestos de elección popular locales: diputaciones, síndicos y ayuntamientos. Van a definirlo por el misterioso y opaco método del “dedazo” por encuestas patito que sólo van a cumplir la voluntad del caudillo tabasqueño; tal como pasó en la CDMX con la designación de la peor opción para candidata a jefa de gobierno, como es el caso de Claudia Sheinbaum, quien camina a la derrota segura.

Amargo. En la capital del estado, la definición está a punto de revelarse. Hay dos opciones en Morena, entre las que escogerá El Caudillo: Antonio López Sandoval y Fernando Tiscareño. Ninguno es militante de izquierda. El primero fue una revelación al interior del PAN en tiempos de la alcaldía de Juan Blanco y de ahí saltó a un papel destacado como oposición al régimen de Reyes Baeza, mientras que el segundo vivía de ese presupuesto público que administraba el PRI en el gobierno estatal y al cual alababa con fervor guadalupano.

Fuerte. Pero cuando la ubre se seca hay que buscar otra que de leche. En el caso de Toño López, abandonó el PAN tras verse acorralado tras perder la elección para alcalde en 2010 frente a Tiscareño (quien era operador estrella del PRI capitalino) y cuando el PAN lo quiso rescatar para ser candidato para competir contra Javier Garfio, su entonces partido le quiso imponer condiciones y mejor se retiró para forjar una carrera sin partido y a consolidar un liderazgo social bien ganado. En el caso de Tiscareño, sin carrera política alguna. Sin liderazgo social salvo una relación familiar, algunos priistas y expriistas que lo siguen y un ejército de robots digitales para alterar las encuestas, no tiene nada más que ofrecerle a Chihuahua.

Escaso. Entonces Morena en Chihuahua tiene la oportunidad de elegir entre un personaje acreditado en diferentes estratos sociales y profesionales; que ha ocupado puestos en el gobierno y en el legislativo y que se ha dedicado a trabajar o elegir entre un profesional del engaño cibernético con mucha hambre de poder.

 

¿Cuál elegiría usted?

Ojalá Morena no se equivoque.

 

Este ha sido el espresso doble de hoy.