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Comenzó Negris como sacerdote a los 23 años

Chihuahua.- El padre Gustavo Sánchez Prieto celebró 40 años de vida sacerdotal, ante lo cual se mostró feliz, vocación que empezó desde los 23 años, destacando que la formación que ha impartido...
  • Por Federico Martínez Vargas
Comenzó Negris como sacerdote a los 23 años

Chihuahua.- El padre Gustavo Sánchez Prieto celebró 40 años de vida sacerdotal, ante lo cual se mostró feliz, vocación que empezó desde los 23 años, destacando que la formación que ha impartido en el seminario le ha dejado bastantes satisfacciones.

Sentado en el sillón de la recepción de su casa, el padre Negris, como se le conoce normalmente, habló de estos 40 años de ministerio sacerdotal, en los que se ha sentido feliz de la vida, ya que le ha tocado iniciar cuando todavía era Papa Pablo Sexto, después Juan Pablo Primero, Juan Pablo Segundo, Benedicto 16 y el papa Francisco.

"Yo le agradezco al señor la oportunidad que me ha dado de poder servir a la iglesia bajo el pontificado de algunos papas, como también, una buena parte de mi ministerio transcurrió al amparo de Don Alberto Almeida y Merino", comentó el padre Negris, a la par que recordaba que Constancio Mrianda fue su compañero de seminario.

A lo largo de estos años de ministerio ha tenido un sinfín de vivencias, las cuales empezaron cuando don Alberto Almeida lo ordenó sacerdote, por lo que a partir de ahí empezó en la pastoral vocacional, para después brindar  la capilla de Santa Rosa de Lima.

"Una experiencia muy valiosa, tenía apenas 23 años cuando inicié yo el ministerio, así que fue una oportunidad que yo le agradezco al señor haber terminado", comentó.

Dentro de las parroquias en las que ha estado, destacó la de Cristo rey en Delicias, posterior a dos años de formación en Roma, para después volver como formador en el seminario.

"Mi vida sacerdotal son 40 años, pero la mayoría han sido como formador en el seminario, una experiencia muy valiosa tanto como formador rector y maestro", comentó.

El padre Negris habló de su experiencia de salud, la cual fue una muestra de acompañamiento muy bonita por parte de la comunidad sacerdotal, católica y de la sociedad en general.

"No puedo más que agradecerle al señor las oportunidades de servir, las oportunidades  de encuentro con mis hermanos, mis hermanos sacerdotes en el ministerio", mencionó.

Calificó como valiosas todas las experiencias que ha logrado recabar en estos 40 años, citando como ejemplo el vivir en Roma de 1987 a 1989, la cual fue una experiencia bonita, pesar del cambio de idioma, costumbres y estilo de vida.

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