La Fuente

*Se retira Héctor Acosta de la lista *Era aspirante a la ASE *El show del oso Barney *Nunca inauguraron hospital en Juárez

  • Por editor TV
*Se retira Héctor Acosta de la lista *Era aspirante a la ASE *El show del oso Barney *Nunca inauguraron hospital en Juárez

EN MENOS de 24 horas, en una acción sorprendentemente coordinada, los cárteles pusieron de rodillas al estado al atacar simultáneamente policías en Chihuahua y Ciudad Juárez. Poco hay que decir y menos aún que escribir, porque, se dejó sentir una mano pesada que los estatales difícilmente podrían controlar si los ataques crecieran en forma escalada. Lamentablemente hubo muertos, uno de ellos el comandante Gerardo Fonseca, en la frontera. En la capital del estado hubo dos acciones más, al mismo tiempo, en donde murió Jorge Salcido, agente adscrito a la policía bancaria de la comisión estatal de seguridad. En Juárez, desde la noche del miércoles, empezaron los ataques contra elementos de la policía estatal. En un instante, ambas ciudades fueron sacudidas por células del crimen organizado, cuyo objetivo era el de aterrorizar y vaya que lograron su objetivo. La autoridad se vio mermada y disminuida, sin capacidad de reacción, inerme e incapaz de defender a la población de la delincuencia bien organizada que azota a la entidad.

ESTE viernes renunciará a su aspiración como auditor superior del estado Héctor Acosta, quien es, por cierto, actualmente, miembro de la comisión de hidrocarburos a nivel nacional. El influyente asesor no es bien visto en palacio, por su relación con El Paisa y, además, recibió un mensaje de Lalo Romero, el líder del pánel de especialistas, en el sentido de que mejor no le entrara. Todo parece indicar que la línea apunta a una final entre Mónica Vargas Ruiz, hija de Martín Vargas Téllez, y Jesús Manuel Molina Murillo, recomendado de ya saben quién. Los que saben, dicen que Héctor Acosta contra los que se inscribieron, sería como poner en una carrera un porsche contra puros carritos datsun. Triste papel, en serio, el del notario Eduardo Romero Ramos, notario público, ex secretario de la función pública y ex secretario general de gobierno, al hacerla de caravanero del gobernador sin necesidad. Pero, en fin, dicen los que saben, Chihuahua se quedará sin un auditor verdaderamente independiente y autónomo, a cambio de otro que le sirva de tapete al ciudadano, como desea Romero Ramos.

EL SHOW de El Oso Barney, podría denominarse, y bien, el episodio donde Armando Valenzuela, el auditor superior del estado, interpone ante la fiscalía una denuncia por la revisión a la cuenta pública de Duarte. Se trata, simplemente, de efectuar campaña, para llamar la atención sobre su candidatura, ahora que será renovada la cabeza de la institución. El tema es que, el congreso local, facultó a El Oso Valenzuela a presentar las denuncias, cualesquiera que fueran, derivadas de la revisión a las finanzas del estado. En siete meses, no hizo nada, es decir, casi todo el 2017 y, ahora, repentinamente, se le prende el foco y empuña como gladiador la espada de la anticorrupción. Es la cuenta pública 2016, así que, en verdad, es un espejismo creado por Valenzuela para hacer campaña en su favor y distinguirse de los demás aspirantes, ahora que puede, pues tiene todavía el poder de la auditoría superior del estado. Además, cuenta con el apoyo de Memo Luján Peña, el que adquirió la actual torre legislativa en un dineral, en la época de los moches con Patricio, y de Arturo Fuentes Vélez, el secretario de Hacienda que no pudo ser senador de la república. 

YERRO fenomenal cometió el equipo de Andrés Manuel López Obrador en Ciudad Juárez, al no informarle, debidamente, al presidente electo, de la mitomanía del señor gobernador. A pesar que los morenistas locales miran a Corral desde hace dos años mentir en forma reiterada -y descarada, se diría- no supieron parar el golazo que les metió hasta el rinconcito. Es que, El Paisanito, hizo decir en un video a López Obrador que el mentado cascarón del hospital de especialidades, en aquella frontera, había sido inaugurado así como está, en plena obra negra. Sin embargo, y ahí están los registros periodísticos, que no dejan mentir, la obra jamás fue inaugurada por la administración anterior. Se hicieron mil visitas al cascarón del hospital, pero nunca se cortó un listón para simular una inauguración. De cualquier modo, Andrés Manuel dijo en ese video (hay que verlo completo) que no se trata de perseguir a nadie y que hay 57 hospitales en condiciones similares en el país, los cuales serán concluidos. Ese estilo de López Obrador para hacer las cosas le rendirá, sin duda, frutos, en breve, pues en lugar de anunciar una indagatoria y un proceso penal para los responsables, terminará con muy poca inversión, a cambio de otra, millonaria, los hospitales en comento. Así que, en el fondo, la victoria de Corral fue pírrica, pero real el gol de meterlo al baile con la mentira de Corral sobre el inexistente listón inaugural.

UNO de los amparos más importantes que se generaron durante la desbandada del duartazgo ante los famosos casos de la fiscalía, fue el de Enrique Antonio Navarrete Jurado con el número de expediente 552/2017. Extrañamente el acto jurídico no llamó la atención de los medios, siendo que como director de planeación y evaluación de la Secretaría de Salud en tiempos de Pedro Hernández, Navarrete era pieza clave de la red financiera. Una y otra vez los auditores han dicho que las cuentas de Hernández están bien, contradiciendo aquellas quejas El Soldier, que gritaba a los cuatro vientos haber recibido una dependencia saqueada por miles de millones de pesos. Extrañamente, ahora se señala por corrupción a El Soldadito de Plomo en las mismas áreas que a su predecesor, al cual no le ha levantado denuncia alguna. En algún momento íntimo, el ahora amparado, Toño Navarrete, comentó: el proveedor que me ordenan hacer ganar las licitaciones, surte solamente los 30 medicamentos de más uso en cantidad tal, que se acaba el monto total licitado y me deja en ceros las otras cientos de claves. Claro que a los auditores les cuadran las cifras de lo presupuestado y lo gastado aunque las farmacias hayan estado vacías. Todos contentos. Entre vendedores y compradores, entonces y ahora, felices los cuatro, especialmente los beneficiados, aunque éstos nunca sean los beneficiarios.