*Por consenso elección de Héctor Acosta *También aprueban a Olivia Franco *Síndico importado *Dos grandes amigas

ESTE jueves elegirán a Héctor Acosta Félix como nuevo auditor superior del estado, con el apoyo de las fracciones del PAN, el PRI y os chiquipartidos. El consenso generalizado consiste en rechazar a El Oso Armando Valenzuela, que no pudo, en definitiva, con el paquete de la ASE. La bancada rosa del PRI, Isela Torres, Karina Velázquez, Rocío Sáenz, Adriana Fuentes y La Kale Beltrán, se irán con la propuesta de Acosta Félix, igual que la fracción del PAN, porque, además, le darán la contra a Omar Bazán, el que quiere que se suspenda el proceso y nombre la nueva legislatura al auditor, para tener la oportunidad de usar sus rodilleras nuevas y arrastrarse de la independencia hasta la Venustiano Carranza. Pedro Torres y Leticia Ortega, de morena, votarán en contra del proceso, a favor de nadie, porque no están de acuerdo. Rubén Aguilar, Alejandro Gloria, René Frías y Miguel Vallejo, ya saben dónde se tocan las puertas y solo falta saber qué hará Cristal Tovar, del PRD, pero ya con eso junta Héctor los 22 votos que requiere. 

OLIVIA Franco también será votada este jueves como secretaria de asuntos inter institucionales en la sesión del período extraordinario, con el voto de las dos terceras partes de los diputados que asistan. La abogada ya se sabe el caminito, pues hay que recordar que fue secretaria del ayuntamiento en la última parte de la administración de Juan Blanco. Ha fungido en diversos cargos del gobierno federal y se ha especializado en áreas administrativas de los distintos órdenes de gobierno. Todo parece indicar que es del equipo y que ya está consensado su nombramiento. Será otra historia lo que ocurra en la nueva legislatura, pero, por lo pronto, apadrinada por Gustavo Madero, entrará a hacer su chamba. 

EL MUNICIPIO de Chihuahua contará con un síndico importado de la ciudad de México, al que no le gusta ensuciarse los zapatos, y que no conoce las colonias de la ciudad. Además, manejará la sindicatura a través del whast app, como ya se vio en la sesión de cabildo de este miércoles, a donde asistió para que le tomaran la foto, con tan mala suerte, que cuando lo hicieron, estaba concentrado en su celular. En la reunión con el saliente, Miguel Riggs, evocaba un capítulo de Manolín y Chilinsky, en donde uno le decía al otro que las cosas estaban muy bien porque le había conseguido al entrante una camioneta nueva. Pero, bueno, el power de La Maru alcanzó para eso y el municipio deberá soportar, otros tres años, a un funcionario sin preparación, experiencia, ni capacidad, que ocupará el cargo tres años, para ver si su madrina en la ciudad de México le consigue otra cosa para brincar a las ligas mayores, a donde pretende ingresar. 

DICEN que es más fácil reconciliar a Javier Corral con César Duarte que a La Maru con Rocío Reza Gallegos, en estos tiempos de cambio. Además, añadiría La Fuente, si en aquel momento hubo diferencia de power -cuando compitieron por la candidatura a alcaldesa, 2016-  en éste la brecha se ha ensanchado, tanto, que ni la comparación amerita. Tal vez por eso, Rocío Reza, le haya dicho, muy en cortito, a su disminuido equipo, que solo buscaría el comité directivo estatal de acción nacional si hay consenso. El consenso tal vez lo consiga, pero, para decirle que no la quieren, los panistas de Chihuahua, luego de haberse sentido por las nubes, primero con El Paisa, después con Ricard Anaya, para darse el sentón de su vida en la reciente elección al senado de la república. Pero, en fin, dijo alguien, la política se vive momento a momento, y, ahora, la etapa recién inaugurada es la de renovar el CDE del PAN.

LA FUENTE quisiera pensar que el caso Dowell forma parte de un cambio de política en el estado, a  partir del nuevo escenario que se vive en la entidad. Y, que, el buen juicio, de los hombres que conocen el derecho, y un poco la justicia, se impuso, sin politiquerías, con sentido común. Puede ser que los amparos en juego pudieran beneficiar al notario, en un momento dado, pero cierto es, también, que el poder del estado le daba para seguir con diabluras de aquí al fin del quinquenio. Es probable, muy probable, que los cambios que se avecinan al interior del gabinete de Corral, impliquen, de la misma manera, hacer más política, buena política, en lugar de proceder al estéril revanchismo. No creemos, como dijo Lucha Castro, la consejera de la judicatura estatal, que el gobierno del estado haya resuelto así, porque, según expresó ella, nos estamos quitando la pipitilla. Si así fuera, que El Muelón se lo reclame, porque, de la misma manera, igual que al secretario general de gobierno, a esta columna le produce ternurita, la posición de alguien que, por azahares, y por fortuna, nunca por méritos propios, sin carrera, ni trayectoria, ni conocimiento del derecho, ocupe, hoy por hoy, un cargo, contra viento y marea, de tal envergadura.