La Fuente

*Con un pie en pgr el contralor del cobach *Capitán cristalero al ataque *Amlo en Chihuahua primero de marzo

  • Por editora02
*Con un pie en pgr el contralor del cobach *Capitán cristalero al ataque *Amlo en Chihuahua primero de marzo

SE SABE que en la auditoría superior del estado, obra un documento que, al parecer, tendrá vista  a la PGR, debido a una flagrante violación a la ley. Se trata que el contralor interno del colegio de bachilleres de Chihuahua, Jaime Humberto Manzanera Quintana, fue observado por el congreso local, debido que desempeña su función por medio de un contrato de prestación de servicios profesionales, esto es, por honorarios asimilables a sueldo. De acuerdo con los que saben, su nombramiento, como titular de la contraloría Interna del cobach, contraviene la ley orgánica de este instituto educativo, y, por ello, los legisladores locales detectaron la anomalía una vez que se hizo la revisión a la cuenta pública del colegio de bachilleres, misma que fue turnada para que la auditoría superior realice las acciones conducentes. 

DICEN que Manzanera no aceptó estar en nómina, con el fin de no afectar su trámite ante el imss, para asegurar su jubilación. Empero, a la misma vez, busca pensionarse por el colegio de bachilleres. Sin embargo, esto no lo es todo, el funcionario cobra también como maestro en el tecnológico de Chihuahua, plantel uno. Sin duda es un caso para la araña, que requiere, toda una investigación; por ello, los auditores están sorprendidos de cómo Jaime Manzanera le hace para estar en tres  nóminas a la vez. En la Declaración Patrimonial este funcionario únicamente citó su remuneración recibida en el Colegio de Bachilleres y omitió lo del Instituto Tecnológico, acción que le será penalizada. Es por ello que, en breve, en la auditoría superior del estado, se conocerá cuál será la sanción que se aplicará al contralor interno y, a su vez, se sabrá cuál será la postura que justificará la directora del cobach, Teresa Ortuño Gurza, por conocer del caso y no actuar en consecuencia.

EL CAPITÁN Cristalero, como le dicen al coordinador del distrito ángel, se decidió a echar grilla con sus subordinados. Este martes, ayer, reunió a los agentes policiacos del centro y les dijo que no es cierto eso de la narcomanta que amenaza a los polis. Incluso, por instrucciones de Johny English, o séase, Gilberto Loya, el mayordomo de seguridad pública, deslizó que se trataba de versiones divulgadas por un medio de comunicación enfocado a desprestigiar a la administración de La Maru. Quién sabe si Miguel Moreno le quiera quitar la chamba a El Pipope, o haya tomado diplomas de marketing político con Rubén Aguilar o otro especialistas, pero, se metió en camisa de once varas. Debería mejor, al igual que su jefe, Johny English, cuidarse de que, con el cambio de régimen, no sean descubiertos, por otras instancias, de la protección que venden, en la venta de cristal de la zona centro de la ciudad. Igualmente, debería tomarse la molestia de arreglar su tema con la comisión nacional de derechos humanos, ya que, por culpa suya, la alcaldía de Chihuahua y su consabida dirección de seguridad pública, están vetados, en temas de capacitación, con la embajada de los estados unidos. Zapatero, a tus zapatos, aunque los tengas todos agujerados, sucios y llenos de lodo. 

EL PRESIDENTE de la república, Andrés Manuel López Obrador, estará en la ciudad de Chihuahua el día primero de marzo. Viene a una gira para efectuar la entrega de tarjetas, o sea, echar a volar los programas sociales para el adulto mayor y los jóvenes. No se ha definido aún, al parecer, el lugar y la hora del evento, en que amlo estará en la capital del estado. Empero, por lo pronto, el delegado, Juan Carlos Loera, empezó a arrastrar el lápiz de aquí hasta que venga López Obrador. Loera de la Rosa aguantó los fuetazos del pasado fin de semana, con la comida de Cruz Pérez Cuéllar, y los subsiguientes predestapes silenciosos de La Maru, Marco y Cabada. Sabe que debe apechugar en estos momentos y asumir que, en morena, es otro el estilo, y más cuando se detenta un cargo público de la naturaleza como el suyo. Así que, sin llorar, a chambear en silencio, pero que se note, para seguir en la pista del porvenir.

LA MARU dejó en manos de su asesor estrella, el nunca bien ponderado, secretario del ayuntamiento, César Jáuregui, el problema de los locatarios del mercado. Hace doce días que ocurrió el incendio y, desde entonces, la alcaldesa no ha tenido la cortesía de recibir a los comerciantes, para nada. Pero, que no fueran los del fashion mall o los de paseo central, o de CTU, porque, entonces, correría ella misma a la oficina de éstos, con rodilleras de luxe. Además, el problema del rey de los mariscos, es la falta de credibilidad, pues, como se vio, ayer mismo, los locatarios no creen en su palabra. No pudo sacarles un acuerdo, aunque saliera a medios, con la mentira de decir que así había ocurrido. Las cosas no andan bien, si un día se reúnen con los mini comerciantes y, al día siguiente, les queman piñatas en pleno centro de la ciudad. Es, sin duda, el desgaste de la reelección, de la simulación y de los business que hacen al amparo de la alcaldía, que, por más que se diga que no, cada vez salen más a la luz pública.