La Fuente

*Viene Encinas a hablar en privado sobre periodistas *Karla Gutiérrez se perfila *Edibray Gómez va por la suya *De la Rocha, un lastre

  • Por editora02
*Viene Encinas a hablar en privado sobre periodistas *Karla Gutiérrez se perfila *Edibray Gómez va por la suya *De la Rocha, un lastre

EN EL instituto de transparencia ya les dan las cuarto para las doce que no se retira de la presidencia Alejandrito de la Rocha a quien ahora apodan El Opaco. Es que, en serio, desde que el gobierno dio a luz al ichitaip, nunca había sido éste tan insignificante. Es realmente vergonzoso ver cómo ha sido destruída la institución, con un comisionado inservible que no ha hecho nada por la transparencia. Ha negociado todas las posiciones habidas y por haber, se ha rendido a los pies de palacio y ha opacado la info peor que en los setentas, en la época de la guerra sucia y el servicio secreto. A De la Rocha no le costó nada  ser un arribista en el ichitaip, pues un golpe de suerte colmó su ambición. Por escrito, renunció a la presidencia, después de conocer el amparo que reivindicaba a Rodolfo Leyva, pero un jalón de orejas de El Muelón bastó para hacerle desistir de sus buenas intenciones. Es un comisionado bizarro, ilegítimo y deshonesto, que debería renunciar al cargo solo por la forma en que llegó. Empero su afición por sobrevivir del erario y exaccionar las arcas públicas, le mantiene desesperado en el cargo de comisionado presidente, hasta que un golpe de justicia le tumbe de lugar en donde nunca debió estar. Dicen que ya falta poco.

AL FINAL del día, Edibray Gómez sintió que es la suya y se registró por la presidencia de la cámara local de comercio. Ciertamente, el de la imprenta imap, lleva ya bastantes años en la búsqueda de ese cargo. Lo raro e interesante del caso es que en estos días las cosas se movieron de forma inesperada. Aquellos que en otros años se opusieron radicalmente a su pretensión, ahora, extrañamente, se sumaron al proyecto. También algunos, diríase bastantes, expresidentes, manifestaron su apoyo a Edibray Gómez. Que se sepa, Javier Cota Arizmendi, no ha declinado ni se ha sumado a la planilla de su contrincante, como se especuló el jueves. El problema de la sucesión en la canaco se llama Carlos Fierro Portillo, pues en los dos periodos que estuvo al frente del organismo -y eso no se le puede negar- hizo todo lo posible por hacerse de enemigos y destruir en lugar de construir. Ha intentado radicalizar a los dos aspirantes, aunque afortunadamente no lo ha logrado, pues ambos tienen la suficiente madurez para entender las cosas y procurar el bien del comercio organizado y no su desmoronamiento. El día 26 de este mes de marzo se devela el misterio con el voto de los comerciantes. No hay más.

PURO chorizo de Camargo eso de los protocolos para resguardar la integridad y las libertades relacionadas con el periodismo de Chihuahua. Alejandro Encinas, el subsecretario de derechos humanos, debería saber que El Paisa ha estado en contra de los periodistas locales todo el tiempo. Ha realizado, ciertamente, algunos eventos, simulados, camuflajeados, para agradar a sus amigos de la ciudad de México, pero han sido puras patrañas para la profesión. Corral ha violado sistemáticamente las garantías de libre expresión y libre publicación, sobre las que descansa el ejercicio profesional. Ha tomado enemigos personales a los medios que ejercen la critica y ha derramado el presupuesto estatal sobre los lacayos y sirvientes que se hincan y se prosternan ante el evidente fascismo con que gobierna la entidad. Si Encinas permite que nuevamente haya solo reuniones privadas con el gobernador, sin periodistas locales, sin opinión ni expresión de los que realmente se dedican al periodismo, se prestará el gobierno federal a tapar el sol con un dedo. Por el contrario, si busca conocer la realidad del periodismo en Chihuahua, debe hablar con quienes ejercen la profesión, de manera franca y abierta. Para muestra, deberían hacerle llegar el proyecto de ley que interpuso el ejecutivo estatal en el congreso, que pretendía castigar a los medios, un documento histórico, por su contenido, al más puro estilo facistoide, que revela la verdadera personalidad del mandatario en relación a los medios y no la mascarada con la que acude disfrazado con sus amigos de la capital del país cuando necesita emprender una nueva cruzada contra sus molinos de viento de la política. 

LA ABOGADA Karla Ivette Gutiérrez se abre paso en la difícil carrera por ocupar la presidencia de la comisión estatal de derechos humanos. El fuego amigo que le dispararon en el organismo se disipará, asegura, por la acreditación que es de humo el ataque, pura parafernalia política interna. Empero, al quedar fuera El Pichú de la Rosa y Blanquita Gámez, las cosas parecen aclararse y despejarse. Karla tiene ya una amplia experiencia en la función pública y en su desempeño como visitadora de la misma comisión estatal. Políticamente está bien en palacio y en la torre legislativa, y aunque es de militancia albiazul, no ha ocupado cargos directivos que le imposibiliten participar. Es decir, no tiene impedimento ni legal ni moral para convertirse en la primera mujer defensora de los derechos humanos en la comisión estatal. Hay grilla, claro, y la puja sigue, pues agrupaciones femeninas que pujan por el espacio pero la diferencia la marca su trayectoria. Los expedientes están en el escritorio de El Mueló, César Jáuregui Robles, encargado de darle seguimiento al tema y consultarlo con El Paisa, de donde, finamente, para qué nos hacemos, saldrá la decisión final. 

NI BLANQUITA Gámez ni El Pichú Gustavo de la Rosa Hickerson pueden ocupar, lamentablemente, la presidencia de la comisión estatal de derechos humanos. Ambos personajes, uno de acción nacional y, el otro, del occiso prd, desempeñaron cargos de dirección en sus respectivos partidos. De la Rosa fue presidente del comité municipal del partido de la revolución democrática en ciudad Juárez. Blanquita Gámez, por su parte, ha ocupado cargos de consejería en el consejo estatal del pan en los años 1995, 1998, 2001 y 2008. También fue integrante del comité directivo estatal en 19994, 1997, 2000 y 2003. En el capítulo II, artículo 9, de la ley de la materia, establece como requisito para ser presidente de la cedh, no haber ocupado ni ocupar puestos de dirección de partidos u organismos políticos. Es lapidaria, sin lugar a dudas, la norma establecida, así que, los dos están impedidos para ser electos en el congreso local para el cargo señalado. Esto podría beneficiar a Karla Gutiérrez, otra militante de acción nacional, que parece repuntar en sus aspiraciones, y que parece tener línea de palacio, sin ser confirmado esto, pero con un negro antecedente por falsificación de documentos denunciado ante la hoy fiscalía general de la república.