Gatito sobrevive dentro de lavadora; lo enjuagaron y centrifugaron

Tener mascotas es una gran responsabilidad, hay que estar al pendiente constantemente de ellos y brindarles cariño.

A veces son tan latosos e inquietos como niños pequeños, un mínimo descuido por parte del cuidador puede resultar fatal. 

Esto lo sabe bien Stefani Carroll-Kirchoff, residente del municipio de Maplewood en Nueva Jersey, Estados Unidos.

La mujer se dispuso a lavar la ropa sin percatarse que su gato Félix, de un año, se había colado en el interior aprovechando que la puerta estaba abierta.

Configuró la máquina para un ciclo completo de lavado rápido de 35 minutos, que incluía enjuague y centrifugado y se dispuso a realizar otras actividades.

Al regresar escuchó un leve "miau" y vio una patita moviéndose entre la ropa.

Como era de esperar, el felino estaba casi moribundo, apenas respiraba y no podía ver nada.

La familia lo llevó inmediatamente al veterinario donde le conectaron oxígeno, le practicaron terapia intravenosa. Además, le detectaron líquido en los pulmones y neumonía.

La estancia en una cámara de oxígeno costó cerca de mil dólares diarios, comentó Carroll a FoxNews, y, aunque la familia solicitó un préstamo bancario para costear las facturas,  no tenían los 3 mil dólares en efectivo solicitados por el veterinario el día del suceso, así que la hija decidió lanzar una campaña de recaudación de fondos en GoFundMe dada la gravedad de la situación.  

En cinco días ha logrado recaudar más de 15 mil dólares. Hasta ahora las facturas médicas han ascendido a más de 7 mil dólares.

La hija de Stefani señaló que el dinero sobrante, en el caso de que el tratamiento de Félix requiera sumas menores, se dará a una organización benéfica para ayudar animales.

Por fortuna, el minino está mejorando poco a poco, va recuperando la vista y ya empezó a comer. El pronóstico es positivo. 

Según los veterinarios, Felix tendrá que permanecer en la cámara de oxígeno al menos hasta este sábado. 

Nos sentimos tan, tan afortunados. Es el gato milagro", confiesa Carroll.

Tomado de Excelsior.