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Llevan 66 bodas y ninguna ha sido legal

Alex Pelling y Lisa Gant querían casarse pero no tener una boda tradicional, y a la vez tenían ganas de viajar. Esta pareja decidió viajar y tener una ceremonia en cada país...
  • Por José Oswaldo
Llevan 66 bodas y ninguna ha sido legal

Alex Pelling y Lisa Gant querían casarse pero no tener una boda tradicional, y a la vez tenían ganas de viajar. Esta pareja decidió viajar y tener una ceremonia en cada país que visitaran hasta encontrar el lugar perfecto para después volver a esa ciudad y casarse de verdad.

Pese haber contraído matrimonio por 66 veces, legalmente son tan solteros como al principio de su travesía.

"Quisimos probar y abrazar la cultura y las tradiciones locales de cada lugar que visitamos, experimentar las diferencias y descubrir qué es lo especial de cada ceremonia, qué provoca y contar a través de nuestro blog cuál es la tradición que más nos inspiró", declaran en su web 2people1life.com.

Lisa, de 32 años, y Alex, de 34, se hicieron amigos en el año 2000. Tras una relación de 3 años, se separaron por motivos laborales y se volvieron a ver hasta 5 años después. Desde entonces permanecen juntos.

Para poder financiar sus viajes, la pareja ahorró por un par de años. Cuando estuvieron listos, vendieron todo lo que tenían, dejaron algunos vicios como fumar, arrendaron sus casas y hasta Lisa renunció a su trabajo como gerente.

"El punto de nuestro viaje es experimentar la forma en que otras culturas celebran el matrimonio. Es un ritual que todo el mundo tiene en común", dijeron en una entrevista publicada en el Daily Mail, en 2011, año que emprendieron la gran aventura.

"Nuestros amigos y familiares pensaron que estábamos locos, pero una vez que les explicamos la idea les encantó, siempre y cuando no nos casáramos legalmente por accidente", declararon en entrevista al Huffington Post.

En cada boda se compran los trajes especiales y pagan una pequeña luna de miel en cada lugar, aunque también Lisa ha usado 14 veces un vestido color perla, que adora.

Un fotógrafo captura cada ceremonia y luego también comparte su experiencia en el sitio web de la pareja.

"Siempre es como si fuera la primera vez, nos ponemos nerviosos antes de cada ceremonia, porque es única", afirmaron.

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