Opinión

Embarazo en adolescentes

  • Por José Oswaldo
Embarazo en adolescentes

Alaizquierda

Por Francisco Rodríguez Pérez

Hace unos meses, el Consejo Estatal de Población realizó una trascendente actividad enfocada a la prevención de los embarazos en adolescentes; hoy vemos como Chihuahua estaba ya encauzado en los principios, desafíos, objetivos y metas que señalan ya no sólo los actos aislados de las entidades federativas, sino toda una estrategia nacional al respecto.

El punto de partida es que los embarazos no planificados son uno de los retos que afectan el desarrollo humano de nuestra población. Ponen en riesgo la salud de la madre y su bebé; y en la gran mayoría de los casos, alteran su proyecto de vida, reduciendo sus oportunidades de educación, trabajo, ingresos y superación personal.

Ante esta realidad, que Chihuahua padece de forma por demás notoria, el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ordenó a distintas dependencias e instituciones del Gobierno Federal, la elaboración de la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes.

Los objetivos de esa gran estrategia son reducir en 50% la tasa de fecundidad de las adolescentes, de 15 a 19 años, para 2030; y que no haya embarazos en niñas de 14 años o menos.

La estrategia nacional se basa en ocho ejes, que en su conjunto incluyen 90 líneas de acción, enfocadas a reforzar la educación, la salud, la prevención de la violencia y las oportunidades para que los jóvenes puedan tener un mejor futuro.

“Es mi deseo que se cumplan con los objetivos trazados y que esto depare una mayor calidad de vida para nuestros menores y para las futuras familias mexicanas” ha dicho el Presidente Peña al encabezar la Ceremonia de Presentación de la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes.

La Estrategia es resultado de un trabajo interdisciplinario en el que participaron académicos, especialistas, autoridades y representantes de la sociedad civil, que además de incorporar las experiencias internacionales incluye las mejores prácticas que se han implementado en nuestro país, como las que se han desarrollado por parte del COESPO Chihuahua, con la coordinación de diversas instancias del Gobierno del Estado y el apoyo decidido del Gobernador César Duarte.

El hecho de alcanzar la primera de las metas de la estrategia significará un esfuerzo redoblado para asegurar que en 2030, realmente pueda reducirse al 50 por ciento la actual tasa de fecundidad en mujeres adolescentes, entre 15 y 19 años, y que no haya embarazos en niñas de 14 años o menos.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) la proporción de nacimientos en madres menores de 20 años había venido disminuyendo en el país, hasta llegar a un mínimo de 16.3 por ciento en 1997. Sin embargo, desde entonces, nuevamente empezó a incrementarse hasta llegar a 19.4 por ciento en 2012.

En 2013, al menos 467 mil mujeres menores de 20 años tuvieron un bebé; es decir, casi uno de cada cinco nacimientos. Más preocupante aún es que esta cifra incluya cerca de 11 mil niñas de 10 a 14 años, que se convirtieron en madres tan sólo en aquel año.

De acuerdo a lo que dictó el Primer Mandatario, estos son los ocho ejes rectores de la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes:

1) Intersectorialidad. La estrategia reconoce la necesidad del trabajo conjunto y de la cooperación entre los sectores público, privado y social, e incluso de la comunidad internacional.

2) Ciudadanía y salud sexual y reproductiva. Contar con información, educación, servicios de salud de calidad que les permitan a los jóvenes tomar decisiones responsables.

3) Perspectiva de género. Evitar el embarazo no planificado en adolescentes no puede ser sólo una responsabilidad de las mujeres. Los varones también son parte esencial del ejercicio de la sexualidad responsable. Tiene que avanzarse en la erradicación de la cultura machista que agrava esta problemática social.

4) Curso y proyecto de vida. La estrategia fomenta el desarrollo de habilidades en los menores, a fin de que puedan definir sus metas de largo plazo y actuar con sentido de responsabilidad, y cuidando de su salud.

5) Corresponsabilidad. La estrategia contempla líneas de acción específicas para generar sinergias entre autoridades de los tres órdenes de Gobierno, padres y madres de familia, comunidades escolares, personal del sector salud, y por supuesto los propios adolescentes.

6) Participación juvenil. La estrategia considera a los jóvenes como sujetos de su propio desarrollo, les reconoce plenamente su derecho humano a participar, no sólo como personas vulnerables, sino como actores centrales de la transformación social.

Los jóvenes no son el futuro, son el presente y tienen derechos, y sobre todo hay que darles espacios de participación para que, junto con ellos, definamos el rumbo y cuál es la manera de que estén mejor informados y puedan tomar ellos sus propias decisiones. Son sujetos de estas medidas, pero también son actores y participantes en las decisiones que se tomen.

7) Investigación y evidencia científica. Dentro de esta estrategia la ciencia y la evidencia empírica ocupan un lugar central en la evolución del diagnóstico de la situación, el monitoreo de las acciones y la medición de los resultados. Y en este marco es importante señalar que el efecto de las medidas se probará con programas piloto antes de expandir su uso a nivel nacional.

8) Evaluación y rendición de cuentas. Como toda política pública que busca incidir positivamente en la vida de los mexicanos, la estrategia no será estática, se mejorará de manera continua para incrementar su efectividad.

Para ello, habrá un sistema de información con indicadores transparentes y accesibles, a través de la recolección de datos de manera regular y confiable.

A partir de estos ocho ejes, como dijo el Presidente Peña, la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes incluye 90 líneas de acción.

Al advertir el fondo del problema, el Presidente dijo: “Literalmente son niñas criando niños, cuando deberían o podrían estar mejor estudiando, divirtiéndose y disfrutando su infancia”.

Luego señaló que del bienestar actual de nuestros jóvenes depende el futuro bienestar de nuestro país. Si nuestros menores crecen en un entorno de derechos y oportunidades, como ciudadanos podrán desarrollarse plenamente y aportar más a la grandeza de nuestro país, y de ahí la importancia de que la sociedad y Gobierno, de que madres, padres, maestros y autoridades sumemos esfuerzos en favor de las nuevas generaciones.

Por su parte, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, aseveró que ante la problemática que significa el embarazo adolescente, que ha venido incrementándose en los últimos años en el país, se creó un grupo interinstitucional en el que participan 13 dependencias de la Administración Pública Federal con un solo objetivo: diseñar mejores políticas públicas en beneficio de las y los adolescentes.

De esta manera, “a partir de la evidencia, un diagnóstico informado y por medio de un proceso incluyente y plural, se diseñó la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes”.

El Secretario Osorio expuso que es una estrategia amplia, multisectorial y, a la vez, focalizada, que acerca más los programas a los lugares donde ellas y ellos se encuentran.

Se trata, dijo el funcionario, “de que en México no haya un solo embarazo producto del desconocimiento, o peor aún, del abuso, sino de que sean siempre el resultado de una decisión informada y del ejercicio responsable de nuestras libertades”.

Destacó que la meta es ambiciosa, pero el propósito que se persigue así lo amerita, porque de ello depende en gran medida la calidad de vida de las y los mexicanos, sean madres, padres o hijos.

Osorio Chong subrayó que si trabajamos a favor de su bienestar, se estarían sentando las bases sólidas que el país necesita para superar cada uno de sus desafíos, porque asegurar el porvenir de México requiere asegurar el desarrollo de los más jóvenes.

En el evento de Presentación de la Estrategia Nacional, la Profesora Investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana, María del Rosario Cárdenas Elizalde, expresó que es preocupante constatar que “entre 2010 y 2013 la tasa de embarazo en adolescentes de 15 a 19 años aumentó en el país y que la dinámica de cambio de este indicador en las últimas décadas ha mostrado avances menores comparados con los observados en otros grupos de edad”.

Señaló que el embarazo en las etapas adolescentes es un problema que atañe a todos los sectores de la comunidad, cuyo impacto se ve acrecentado en los grupos socioeconómicos con mayores rezagos, propiciando con ello una mayor desigualdad en la sociedad.

La académica afirmó que el objetivo de la Estrategia debe ser la generación las condiciones que posibiliten el cumplimiento de los derechos que de manera central afectan a los niños y adolescentes, pero también, el consignado en la Constitución a tener una reproducción libremente iniciada, espaciada y con el número de hijos que se desee tener. Es decir, que todo nacimiento que tenga lugar en el país sea planeado y su ocurrencia forme parte de un plan de vida que integre las expectativas que cada persona pueda proponerse para su desarrollo y su inserción en la sociedad.

Cristina García González, adolescente de 15 años, originaria de Temascalcingo, Estado de México, invitada al evento, afirmó que “las jóvenes necesitamos información, conocimientos y orientación para poder decidir sobre nuestra vida y lo que queremos hacer; conocer los riesgos a los que nos enfrentamos y saber para poder elegir”.

Se congratuló por la presentación del programa porque, dijo, “piensa en los jóvenes”, y destacó que participarán el él. “Me gusta lo de: Es tú vida, es tú futuro, hazlo seguro. Porque es cierto que es nuestra vida y que debemos saber cómo hacerle para que nuestro futuro sea mejor y cometer menos errores”.

Por ello, expuso, “queremos decidir libremente si nos casamos o no; si somos madres o no. Lo que queremos es estudiar, crecer y experimentar. Pero necesitamos que nos acompañen para tomar buenas decisiones, que nos abran las oportunidades y nos brinden conocimientos; pero, sobre todo, que confíen en nosotras, para que podamos seguir confiando en ustedes.

Por su parte, Rafael España de la Garza, acreedor de Mención Honorífica en el Concurso Juvenil Debate Político 2014, afirmó en el evento: “una estrategia como ésta nos puede ayudar a hacernos más conscientes y responsables de nuestras acciones, a evitar situaciones muy difíciles, a conocer nuestros derechos y obligaciones; a saber que el sexo es cosa de dos y acordar con nuestras parejas para vivir de mejor manera nuestras vidas”.

Señaló que durante mucho tiempo ha escuchado que ellos, los jóvenes, son el futuro de México, pero precisó: “quiero decirles que eso no es cierto. Somos el presente. Ya estamos aquí”.

Argumentó que, en su caso, tiene sueños, ambiciones, sentimientos y quisiera tener una vida llena de oportunidades: “Por eso sé que tengo que prepararme para ser un padre, para tener una familia; cooperar con mi pareja y decidir entre los dos cuándo tener dicha familia, que no sea por un descuido, por un accidente”.

Así pues, en Chihuahua, en el COESPO, en el Gobierno del Estado, nos congratulamos por la presentación de la Estrategia Nacional de Prevención del Embarazo en Adolescentes, y estamos firmes, trabajando en sus objetivos, metas y desafíos. ¡Hasta siempre!