Entre caos y anarquía aprueba congreso con 25 votos a favor nueva ley electoral

Chihuahua.- Entre caos, desorden y anarquía, el congreso del estado aprobó la forma constitucional a la ley político electoral, con 25 votos a favor, incluido el voto de la diputada Teporaca Romero y la abstención del diputado Eloy García Tarin.

Los diputados del Partido Acción Nacional ni cuenta se dieron de la votación.

El dictamen incluye los candados a las candidaturas independientes, es decir, el requisito de no haber ocupado cargos de elección popular ni de dirigencia partidista los anteriores tres años.

Asimismo, se aprobó que los partidos políticos en el estado mantengan su registro con el dos por ciento de la votación estatal pero adquieran el derecho de prerrogativas con el tres por ciento de los sufragios.

Con el mismo dos por ciento los partidos entrarán en la ronda para la repartción de diputaciones plurinominales.

La diputada Laura Domínguez, tuvo que hablar en voz muy alta ante el micrófono a fin de que pudiera escucharse el dictamen que da paso a esta reforma, y en medio de gritos, dio lectura al decreto de inicio y hasta las últimas páginas. 

Una vez leído el documento, el ruido que generaban los invitados aumentó acompañado de insultos como traidores, vendidos y otros más fuertes, en el momento en que el diputado Enrique Licón, como primer secretario se encargó del conteo de los votos.

El diputado presidente, César Pacheco hizo uso de la palabra y enfatizó que la reforma permitirá las candidaturas ciudadana independientes, la integración de 3 disputados más, un 2 por ciento de la votación para mantener el registro como partido político y un 3 por ciento de la votación para tener derecho a las prerrogativas.

La sesión de este lunes en el Congreso del Estado de Chihuahua, concluyó cuando los legisladores del PRI abandonaron el recinto que permaneció tomado por los diputados del PAN y de forma repentina, en el sonido ambiental del poder legislativo se escuchó a todo volumen la canción Enter Sandman, interpretada por el grupo Metallica, con la finalidad de que los gritos y matracas que introdujeron los panistas no se escucharan.