Buen Domingo

Cónsul rémora, a la "shanghaida"

  • Por lujardo

Por Ricardo Luján

 

-¡Eres una rémora, bazofia..! le gritó indignado el cónsul mexicano en Shanghái al enloquecido cónsul adjunto, a quien literalmente se le metió el chamuco al armar vergonzoso sainete en la sede diplomática mexicana, ante la mirada atónita del personal.

 -¡Bazofia tu chingada madre, eres un culero! respondió el subalterno lejos de intimidarse… “a mí no me hablas así porque soy funcionario de México”, dijo tras pendejearlo sonoramente.

En verdad se le fueron las cabras a Leopoldo Michell Díaz, diplomático comunistoide enquistado en el servicio exterior mexicano, cuando se encabritó de fea manera.

El escándalo que se armó en las redes fue mayúsculo, el video se viralizó el jueves pasado, donde se le ve de greña larga y canosa, barba descuidada color gris sucio, atuendo más que informal con una camiseta café con visibles manchas de sudor y encabronadísimo.

Tan fuera de sí se puso que algunos creyeron que andaba borracho, pero era tanto el acelere que más bien parecía andar drogado o sumamente crudo. 

Más que una representación diplomática aquello parecía la cámara de diputados, con el Changoleón Fernández Noroña en los tiempos de Calderón protestando por el fraude electoral, sólo que al cónsul no lo desalojaron cargándolo como puerco.

Cual acertada metáfora, el doble calificativo del cónsul general Miguel Ángel Isidro Rodríguez, a su adjunto -rémora y bazofia- caen como anillo al dedo a la llamada cuarta transformación y a muchos de sus funcionarios, sobre todo legisladores, gobernantes, alcaldes y regidores, miembros o paleros de Morena.

Las rémoras son peces que se adhieren a otras especies marinas para alimentarse a su costa, succionando de otros los nutrientes esenciales para la vida. Zánganos, pues.

El certero apelativo, viniendo de quien lo conoce bien,  muestra de cuerpo entero al energúmeno: se dedica a sangrar al servicio exterior mexicano para su beneficio, sin aportar, solo succionando, como improductiva  sanguijuela hinchada de sangre robada.

El significado de “bazofia” es más ilustrativo y contundente: “mezcla de heces, sobras o desechos de comida”. Otro epíteto certero para el “obradoriaje”.

El alto funcionario consular ha pasado toda su vida profesional en “modo rémora”, en puestos diseñados para tirar hueva o cosas mucho peores: coordinador de.., representante de.., enlace político de.., jefe de asesores de.., encargado de asuntos multilaterales de…

Su tesis por el Colegio de México se llamó “La Internacional Comunista en México y su sección nacional: el Partido Comunista”. Ahí nomás.

Hace años recibió la condecoración de la Orden de la Corona en grado Comendador, otorgada por el gobierno belga, distinción que valió ídem luego de su irracional comportamiento.

El emisario de la diplomacia en cuestión percibe un sueldo de 160 mil pesos mensuales y ni así le alcanza para vestir de acuerdo a su elevada función de servicio público.

 

El motivo de su desmesurado enojo fue la negativa del jefe de área de servicios consulares a tramitar una visa para un solicitante a quien deseaba ayudar, sin cumplir con los requisitos.

Entonces fue cuando Michel Díaz explotó y empezó a gritonear, manotear e insultar a los empleados, hasta que llegó el mero mero a poner orden, desatándose el pandemónium.

Ante tan esquizofrénica reacción, cabe preguntar quién sería el tal solicitante del documento, pero como eso nunca se sabrá con certeza, podemos imaginar que se trataría de un encargo muy importante, tal vez de algún personero del narco interesado en consolidar operaciones en el mercado asiático del fentanilo, o de un poderoso secretario en México que quiere colocar prestanombres para hacer negocios con dinero mahabido. Piensa mal y acertarás.

¿Quién sería su conocido que montó en cólera cuando no pudo favorecerlo? ¿Se sintió ofendido por su frustrado influyentismo? ¿Habría cobrado algún dinero por adelantado por el trámite? ¿Buscaría salvoconducto para algún prófugo de la justicia? ¿Trataba de meter de incógnito a Shanghái a algún espía ruso..? 

Son preguntas precisas, concisas y macizas, que los psicólogos encuadran como “falacias del peor motivo”, en literatura es simple “lógica de posibles narrativos”, en las redes son fakenews y los estudiosos le llaman “postverdades”.

Polito dice que la visa era para un estudiante que buscaba regresar a México, pero quién sabe.

Es un misterio cómo terminará este plenipotenciario desmadre, pero por lo pronto la secretaria de Relaciones Exteriores dijo que Michell ya fue removido. A ver si en su lugar no ponen al “Changoleón remasterizado”. Total, ya dijimos que se parecen.

Luego de todo el despapaye a Polito le preguntaron si se disculparía, a lo que el diplomático contestó: “No voy a disculparme, porque así hablamos los mexicanos...”

Más tarde remataría:

“Esa palabra, pendejo, define una situación y él es el embajador más pendejo del servicio exterior, así se lo dije y así lo creo, hay una disputa por ver quién es el más pendejo pero yo creo que después de esto él es el más pendejo, cómo se atreve a filtrar un video como el que filtró”, declaró.

 

Lo cierto es que si Polito fuera funcionario chino ya lo habrían fusilado…por pendejo.


 

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