Donald, el pato que no envejece
- Por Daniela Jiménez
En junio de 1934 pocos se imaginaron que el pato que apareció fingiendo un dolor de estómago para no ayudar en el trabajo de campo a la gallina en el cortometraje La gallinita sabia, se convertiría en el mejor amigo de Mickey Mouse, y en uno de los personajes más emblemáticos de Disney.
Mañana, 9 de junio, hace 80 años, el Pato Donald hizo su debut cinematográfico, junto con Peter Pig, en la caricatura creada por los estudios Disney. La también conocida como sinfonía tonta -historia que tomó como base el cuento de origen ruso The Little Red Hen- hizo que Donald bailara feliz al ritmo de la clásica tonada que silban los marineros al mismo tiempo que hacía lo imposible para evitar ir a trabajar, actuación que lo colocó en el centro de los reflectores de donde, desde hace ocho décadas, no se ha movido.
El simpático pato de raza pekín, que viste un traje de marinero, corbata de moño roja, habla de manera casi incomprensible y tiene una personalidad explosiva no fue creado como resultado de la casualidad. Después de que Mickey Mouse comenzara a convertirse en un buen ejemplo para los niños, Walt Disney decidió crear un personaje en el que pudiera colocar aquellas no tan buenas características de personalidad como el mal carácter y, de pronto, el desinterés por el trabajo. Fue así como el pato, quien tomó su nombre de la leyenda del cricket Donald Bradman, quien en 1932 se retiró de un partido con un marcador de cero.
A partir de estas características, Dick Lundy comenzó a desarrollar a Donald como un personaje con personalidad propia. El pato siempre ha contado con dos características que no han variado en 80 años: su bueno humor y poco interés por lo que sucede a su alrededor, hasta que algo que lo afecta sucede, y su poca tolerancia y control de su mal humor, hecho con el cual lucha para que no explote. Dick Huemer y Art Babbit fueron los primeros encargados de animarlo y darle vida a esas características.
Pero Donald necesitaba una voz propia que lo distinguiera dentro del creciente mundo de Walt Disney. El actor Clarence Nash (1904-1985) se enteró de que los estudios Disney estaban buscando personas que pudieran dar voz a los animales de las caricaturas que estaban produciendo y asistió a las pruebas dejando particularmente sorprendido a Walt Disney por su capacidad de imitar a un pato, convirtiéndose así en la voz oficial de Donald durante 51 años.
Su carisma y personalidad llevó al Pato Donald a convertirse en una estrella desde su debut cinematográfico; 178 cortometrajes -41 más de los que ha realizado Mickey Mouse-, ocho nominaciones al premio de la Academia, ganador de un premio Oscar y el personaje que ocupa el quinto lugar de los más publicados en el mundo, tan sólo atrás de Superman, Batman, Spider-Man y Wolverine, lo han mantenido como uno de los pilares esenciales de la maquinaria Disney.
Tal fue la aceptación del público por el personaje que Disney, que desarrolló un universo alrededor del Donald en donde el pato que viste como marinero tiene una hermosa novia que usa un moño rosa en la cabeza, Daisy. Hugo, Paco y Luis son sus tres traviesos sobrinos, Rico Mc Pato es el tío millonario de Donald, mientras que Ludwing von Pato, también conocido como Perico Librote, es el tío intelectual -y hermano de Mc Pato- de Donald. En este universo creado por Disney también existen los antagónicos que para el pato sería las ardillas Chip y Dale.
Si bien en la mayoría de los cortometrajes y caricaturas Donald mantuvo su personalidad, fueron pocas pero específicas donde el pato tuvo un oficio. En 1942 mientras el ejército Nazi dominaba Europa, Disney lanzó el cortometraje The Fuehrer’s Face (El rostro del Fuhrer) en el cual Donald aparece con el uniforme nazi trabajando para el tercer Reich, en lo que resulta ser un mal sueño. El siguiente año de su estreno, este trabajo fue galardonado con un premio Oscar como Mejor Corto Animado.
Una de las características únicas de Donald es su particular y casi inentendible forma de hablar, sin embargo en 1947 en el cortometrajeDonald’s Dilema el pato recibió un golpe en la cabeza que le permite hablar con una voz clara y profunda, lo cual lo lleva a convertirse en cantante, al estilo de Frank Sinatra. Pero la fama hace que abandone a Daisy, quien no se conforma con el recuerdo de su cariñoso pato, por lo que decide ayudarlo para que vuelva a ser quien es.
Donald es un personaje con buenos mensajes, que logró una empatía con el público que lo percibe como un ser que fracasa, pero que continúa esforzándose para alcanzar sus metas. En 1984, en el 50 aniversario de su debut cinematográfico, Donald, acompañado por su voz, Clarence Nash, inmortalizó sus patas y su nombre durante la ceremonia que el Teatro Chino de Los Ángeles, uniéndose así al círculo de estrellas de Hollywood.
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