¿ESTÁS AHÍ?

¿Andrea, Andrea, estás ahí? preguntan por todos lados, en todo el país, acerca de la influyente Senadora de la República. Es que, según todo indica, a Andreíta, que resulta ser la Vocera del Grupo Parlamentario de Morena, se le acabó la voz. Otros dicen que prefirió poner pies en polvorosa, literalmente, para huir de la gran llamarada que está quemando en cuerpo y alma a su padrino político. Es que, la juarense no ha abierto la boca, no ha dicho ni pío, nada de nada, sobre el caso del Secretario de Seguridad Pública de Tabasco en la administración de Adán Augusto. Otros, más atrevidos, piensan que el viejito dejó de serle útil y que, al igual que a la Exsenadora Berta Caraveo, le traicionará. Es obvio que Adán perdió la mitad de su poder en este episodio, pues la criptonia de su colaborador le dejó más débil que a Supermán en su llegada a la tierra. El Senador estuvo el domingo en el Consejo Nacional de Morena como perro con la cola entre las patas, una especie de trofeo político que exhibió Morena para enviar el mensaje interno de que la Presidenta de la República es Claudia Sheinbaum y nadie m{as. Así, que, Andreíta, cuando veas las escasas barbas del tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar, o cuando menos mete reversa, que también es cambio.