¡Si anulas tu voto, te anulas tú mismo!
- Por Daniela Jiménez
Comentarios de prensa
Luis Ochoa Minjares
El ya cercano domingo 7 de julio todos los ciudadanos mexicanos, hombres y mujeres, acudiremos a las urnas electorales a depositar nuestro voto a favor del partido político y sus candidatos que más se acomoden a nuestro modo de pensar y a nuestros anhelos y esperanzas. Nadie debe disuadirnos a no votar.
Nada ensombrece el escenario electoral que empieza mañana lunes, excepto esas voces desorientadas y antipatrióticas que pugnan por entorpecer el proceso exhortando a anular el voto unas veces, a sabotear la elección en otros y en casos extremos, a aterrorizar al votante. Nada lograrán porque no tienen la fuerza de la razón.
Quien no vota no cuenta para nada en la vida cívica y política de su comunidad. Una forma de suicidio civil es sustraerse por apatía, por modorra o indiferencia al cumplimiento de los deberes cívicos. Otro modo de auto eliminarse del conjunto social en el que se vive, es no ejercer los derechos inherentes a todo ciudadano en un sistema democrático.
El Estado mexicano invierte considerables recursos provenientes de los impuestos que pagamos para mantener e impulsar la democracia en nuestro país. Los partidos políticos están considerados constitucionalmente como entidades sociales de interés público porque son los instrumentos de que se sirve el pueblo para organizarse políticamente.
La ciudadanización de los organismos electorales es el fruto de un gran esfuerzo de los mexicanos y sus gobiernos para transparentar la democracia y poner al cuidado de los ciudadanos el manejo de todos los procesos de selección y elección de nuestros gobernantes municipales, estatales y federales.
Garantizar la limpieza y la transparencia de todo proceso electoral constituye la misión central y superior de los organismos electorales manejados por ciudadanos ajenos a los puestos del sector público. Ello siembra la confianza en los electores y los incita a participar con entusiasmo al emitir su voto.
LOS CONFLICTOS POSELECTORALES
Una suprema aspiración de los ciudadanos sería concluir los procesos electorales sin los consabidos “conflictos poselectorales”, alentados y fomentados siempre por los partidos minoritarios y candidatos perdedores que no obtienen el triunfo en las urnas, algunos con demandas absurdas como la cancelación de los comicios que no les dieron la victoria.
Algunos partidos y dirigentes incapaces de convencer al electorado, ya asomaron la cola y lanzaron sus insolentes amenazas de rechazar los resultados electorales, ensuciar al proceso electoral y difamar a los candidatos triunfadores y sus partidos.
Exhortar a la “anulación de los votos” para entorpecer el proceso democrático, solo lo hacen quienes de antemano saben que los resultados le serán adversos. Esta serie de amenazas y medidas suicidas, en nada contribuyen al perfeccionamiento de nuestro sistema democrático.
Por fortuna, Magistrados del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en previsión de estos conflictos artificiosos y antidemocráticos, previeron la capacitación de un ejército de abogados expertos en Sistemas de Impugnación en materia electoral y Sistema de Nulidades.
Se trata de reducir los conflictos poselectorales a su mínima expresión para no entorpecer o retardar la marcha de municipios, Estados y del país mismo.
LOS ARTICULISTAS Y LAS ELECCIONES
Vale la pena recordar algunas opiniones en torno al importante papel que tienen nuestros articulistas frente a los procesos electorales más trascendentes y significativos en la historia de la democracia mexicana, cuyo texto simplificado dice:
“Enseñar, defender y alabar, son algunas de las principales oportunidades que se le ofrecen al articulista”.
“Tener a raya la pasión, pensar en frío, desasirse de preferencias egoistas, son precauciones que debe tomar el articulista”.
“Aunque no se quiera, el artículo editorial es como una maza que golpeando, golpeando, tritura peñascos y hace y deshace políticos”.
“La confrontación de las ideas, tesis y opiniones entre los colaboradores, despiertan el interés de los lectores y contribuyen a despertar su capacidad de análisis”.
No es pues, menor la misión que tienen los articulistas frente a los lectores de todos los medios impresos, particularmente ante la embestida que a través de los medios electrónicos amenaza a nuestro ya cercano proceso electoral.
¿QUÉ HICIMOS EN LA SEMANA SANTA?
Hoy, Domingo de Pascua termina la semana de recogimiento y meditación. Antaño, los días cuaresmales de la Semana Mayor eran propios para el recogimiento espiritual y la reflexión, y en algunos casos, ocasión para visitar el terruño, el pueblo o el rancho donde el olor a pan, la nostalgia, el afecto familiar y la sonrisa de los coterráneos nos recordaban los bellos tiempos de la irrepetible y lejana infancia.
Recorrer la Ciudad aprovechando la quietud de esos días de guardar, era en alguna forma vivirla y disfrutarla. Advertir de su inusitado crecimiento, de sus calles tranquilas y seguras, sus barrios y sus colonias, no obstante sus carencias y sus añejos y múltiples rezagos urbanísticos. Hoy, además de todas esas dificultades, persisten residuos del cáncer de la delincuencia.
Tiempo atrás tuvimos alcaldes de extrema sabiduría y notable sensibilidad que preferían renunciar a los placeres mundanos de unas vacaciones en las playas o en las montañas de Ruidoso, y optaban por quedarse a vivir los “días de guardar” en su comunidad y meditar sobre los problemas, principalmente los no resueltos.
Cuanta experiencia y prestigio ganarían nuestros regidores y diputados si en lugar de ir a la playa, refugiarse en sus granjas de descanso o esconderse en un sitio de veraneo, se dignaran dedicar el descanso de la Semana Mayor a meditar sobre sus compromisos y obligaciones y a visitar a una que otra familia de las olvidadas colonias.
REFLEXIONES CUARESMALES
Estamos seguros que nuestros funcionarios reflexionaran en estos días de la “cuaresma opaca” en la existencia de los sectores más afectados por el continuo y progresivo envenenamiento del aire que respiramos cerca de un millón y medio de habitantes del municipio de Juárez.
No sería pecado meditar en estos días santos en la conveniencia de una movilización colectiva en contra de los factores principales de la contaminación del medio ambiente fronterizo como las industrias contaminantes, los automóviles chatarra y los millones de llantas acumuladas.
Otro motivo de serias reflexiones cuaresmales fue acerca del alto índice de accidentes automovilísticos provocados por el alcoholismo y la drogadicción, y que enlutan diariamente a cientos de hogares, principalmente de la gente que trabaja.
Es posible que el aumento de las multas a guiadores ebrios aminore un tanto este grave problema, aunque aleguen que, por tratarse de la semana mayor, la embriaguez es sagrada.
FINALMENTE un comercial, pero de libros:
Se dona a institución cultural o educativa lote de 150 libros y folletos de diversos temas. Celular 203-54-51.
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