Las buenas cuentas de Chihuahua

Por Carlos Jaramillo Vela

Chihuahua está siendo objeto de cuantiosas inversiones privadas, lo cual significa la existencia indiscutible de un ambiente de confianza y tranquilidad dentro de la entidad. El hecho de que importantes empresas internacionales como Heineken y Ford hayan enunciado grandes proyectos de inversión que en conjunto superan dos mil millones de dólares, en el municipio de Meoqui y la capital del Estado respectivamente, es signo evidente de las condiciones que la entidad ofrece en aspectos como seguridad, infraestructura y servicios.

Entre las características sobresalientes del trabajo desplegado durante la administración del gobernador César Duarte, se han destacado los logros obtenidos en los rubros de economía, seguridad pública, educación, salud y justicia. Particularmente, por lo que respecta al tema de la promoción económica y el impulso a las nuevas inversiones productivas, nadie puede negar el esfuerzo realizado por el mandatario estatal, tanto en el interior del país como allende sus fronteras. Los diversos viajes que el titular del Poder Ejecutivo y sus colaboradores en materia económica, han efectuado a Asia, Europa, Canadá y Estados Unidos, hoy dan los resultados esperados. Los recientes años nos han permitido a los chihuahuenses ser testigos de varias inversiones, anunciadas no solo en las ciudades de Juárez y Chihuahua, sino también en otras cabeceras de los municipios del Estado, llevadas a cabo por consorcios chinos, coreanos, franceses, norteamericanos y canadienses. En las últimas semanas las noticias sobre el panorama industrial de Chihuahua no solo han mejorado, sino que han colocado al gobierno local y a la entidad en los escaparates nacional e internacional, cuando en la residencia oficial de Los Pinos se dieron a conocer las cuantiosas inversiones de Heineken y Ford, en un evento en el que los altos directivos de los emporios cervecero y automotriz acompañaron al Presidente de México, Enrique Peña Nieto.

Además, los crecientes avances registrados en los renglones agrícola, ganadero, turístico y minero, consolidan notablemente al Estado de Chihuahua, posicionándolo en el entorno nacional como una de las economías más fuertes y diversificadas. Es pertinente recordar el liderazgo cualitativo y cuantitativo de la entidad en la producción de manzana, alfalfa, chile, nuez, leche, carne de res, oro y plata; así como el vigoroso auge que la llamada industria sin chimeneas está teniendo en Chihuahua, mediante el establecimiento de nuevos hoteles en los principales centros con afluencia de turismo de negocios y/o recreación. Es justo también reconocer que la aplicación de estrictas medidas sanitarias al ganado chihuahuense, aunada a las permanentes gestiones encabezadas por el Gobierno del Estado ante las autoridades de los Estados Unidos, finalmente permitió que este país levantara la veda a la exportación del ganado vacuno, cuyo precio actual ha alcanzado tan buen nivel que ha hecho resurgir en modo firme a la tradicional actividad pecuaria de Chihuahua.

Esta es, de manera breve, solo la referencia descriptiva de una parte de los importantes objetivos alcanzados durante el ejercicio de la presente administración estatal. Es una reseña parcial del lugar que hoy ocupa nuestro estado en el contexto nacional. Es una muestra de las buenas cuentas de Chihuahua.

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