Se niega a hablar de su padre Leonardo García
Un conflicto familiar mantiene distanciado a Andrés García de su hijo Leonardo y los roces han dado de qué hablar en los últimos días. todo parece indicar que el resentimiento singue afectando a su relación, pues así lo demuestran las declaraciones de Leonardo García.
El problema inició esta vez a partir de ciertos comentarios que hizo Andrés García a propósito del problema de salud que casi lo dejaba paralítico. En esa ocasión comentó que no contaba con el apoyo de sus hijos, haciendo especial hincapié en Leonardo.
En un programa reciente, Andrés volvió a tocar el tema y recalcó la falta de ayuda por parte de Leonardo, lo cual obtuvo como respuesta algunas declaraciones de éste. El hijo del actor indicó a los medios que sí estuvo al lado de su padre por tres semanas cuando salió del hospital, pero que prefería ya no hablar más de eso y no darle más alas, pues se siente profundamente decepcionado.
Por su parte, Andrés García respondió casi de la misma manera, al señalar que no quiere ya saber más del tema porque es algo de años atrás que le lastima por dentro. Así las cosas entre padre e hijo, que no se ve que vayan por muy buen camino.
Claudia con sus exabruptos
muestra nauseabundo pus
pues protege, aunque corrupto,
al prestanombres de Cruz...
CORRAL, AUNQUE NO LE CUADRE,
DEFENDERÁ A SU COMPADRE.
![[Lo que faltaba; migrantes intentan secuestrar a conductora Uber]](/__export/sites/laopcion/img/2024/04/26/biUIvfolHgky6dYA.jpg?v=3)
[Lo que faltaba; migrantes intentan secuestrar a conductora Uber]
Ya andaba el rumor de que migrantes que están de paso por la ciudad estaban empezando a delinquir y hace unos días, tres de ellos intentaron secuestrar a una conductora de la plataforma Uber.
Dicen que fue durante la mañana del miércoles pasado, cuando la víctima llamó a la policía para reportar lo que le ocurrió.
Los polis fueron al bulevar Juan Pablo II, al Hotel Casa Colonial, ahí los esperó la conductora afectada quien les dijo que dos hombres y una mujer, extranjeros, intentaron secuestrarla y quitarle su auto.
La joven guiadora se defendió y los frustrados malandrines tuvieron que pelarse corriendo rumbo a las vías, en la zona donde hay decenas de migrantes.
Los policías hicieron recorridos en busca de los responsables, pero no los hallaron, ya que posiblemente se cambiaron de ropa rápidamente o se metieron en las casas de campaña.
Así que ahora la poli tendrá que estar más al pendiente del campamento de migrantes, porque dos que tres se van a estar aventando sus malandreadas.
Foto ilustrativa
- Por Federico Guevara
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