*Los Desalojados de La Maru, inhumano *Amparo vs jueces cambia orden *Relajo en el spauach *Atorado tema de comisión jurisdiccional

PUES, al parecer, un amparo, contra el consejo de la judicatura, por la convocatoria para jueces, ya puso más interesante y calientita la cosa. Porque, en uno de los amparos, el 1488/2018 del juzgado décimo de distrito, se ordenó que se notifique también a los jueces civiles y familiares, en calidad de terceros interesados, y no solo a los penales. Esto puede desprenderse de la lectura que se analiza sobre la constitucionalidad y legalidad, no solo en la materia penal, sino de manera integral, en la citada convocatoria. Esto cambia las cosas, porque, el debate jurídico será enriquecido y, el análisis y las conclusiones del caso, podrían ser modificadas. Lo otro es que, el consejo de la judicatura debe hacer públicas sus sesiones, pues parecen eventos de la era cuaternaria, donde todo lo arreglan a garrotazos. No es posible que, nadie, pero, nadie, se entere de los acuerdos que ahí se toman. Ya se sabe que las instrucciones y las directrices provienen de palacio, así es que, deben aprender a cuidar las formas, sin empañar la transparencia básica que se requiere en estos asuntos.

DE un solo golpe, El Gandallita Omar Bazán, se quitó de encima a El Capitán Arrieta y al hermano de Odorico Vázquez, de la CNC. Ambos aspiraban a dirigir la central campesina en el estado de Chihuahua, pero, mátalas callando, Bazán les echó la soga al cuello. Puso, presumiblemente de manera interina, a Lupita Rodríguez González, militante tricolor y militante cenecista, además de haber sido diputada local por el distrito con cabecera en Bocoyna. Seguramente, el proyecto de Omar consiste en estirar la liga, hasta donde se pueda, para que siga ahí Lupita. Los demás aspirantes a dirigir la vieja liga de comunidades agrarias, no son del agrado del dirigente estatal del pri, así que, por lo pronto, no cambiarán las cosas. Así que, Lupita Rodríguez, andará ahí un buen rato, en la central campesina independiente, hasta que las cosas cambien.

HAY que ver si El Bigotón José Luis Armendáriz, presidente de la comisión estatal de derechos humanos, avaló el movimiento de Los Desalojados de La Maru, como dice la propia alcaldía. A grosso modo, simplemente por las fotografías, pareciera que eso fuera imposible, pues a simple vista, no puede decirse que en el predio de punta oriente, se respeten esos derechos. Hay niños, literalmente, en la calle, sin chamarras, sin zapatos, sin comida y sin casa, sin un cuartito, sin agua, sin luz y sin drenaje, abandonados por la autoridad en ese lugar. Habría que ver si a eso se le puede llamar respeto a los derechos humanos, o si lo sabe Armendáriz, porque la mayoría de la gente no piensa igual que el municipio. A leguas se nota que no es el predio señalado un paraíso de los human rights, sino, por el contrario, un infierno, sobre todo para los niños, que deambulan, inocentes, sobre las dunas de la arbitrariedad y la prepotencia de una alcaldesa que se esconde para ordenar la ejecución de esas medidas.

LOS maestros sindicalizados en el spauach concluyeron que nada podían concluir después de seis horas de discusiones y con un frío endemoniado en al jardín y mejor dieron por terminada la reunión y se retiraron. Lo más grave del tema fue se dio en la intención de rectoría y del sindicato charro, para aletargar las pensiones hasta los 65 años de edad, cuando ahorita es por antigüedad. Además, claro, el propósito de subir del 4 al 12 por ciento la cuota de pensiones civiles del estado para los catedráticos de la universidad. El Doctor Alfredo de la Torre, fue, por cierto, uno de los más entusiastas opositores a la reforma, en contra de Rubén Torres Medina, aquel viejo amigo en la década de los ochentas, que, ahora, es un contra radical, empleado del sindicato. Agendaron una nueva cita para el próximo jueves en el paraninfo universitario, pero, por ahora, bien puede decirse, El Reptore perdió el segundo round de la pelea.

EN EL congreso andan atorados con la integración de la comisión jurisdiccional, a la que no le hallan, literalmente, ni pies, ni cabeza, la verdad de las cosas. Son cinco miembros, que realizarán las funciones de presidente y secretario, así como tres vocalías. Sin embargo, aunque la ley refiere la pluralidad con que debe ser compuesta, El Metralleta Álvarez Monge, exige dos lugares. Y no pide cualquiera, sino, precisamente, la presidencia y la secretaría, lo cual es, totalmente, absurdo. El otro tema, aparte de la discusión sobre los espacios, estriba en definir si esa comisión jurisdiccional, será permanente o transitoria. El espíritu del artículo que la refiere, parece apuntar a la posibilidad de que se integre la comisión por asunto y, una vez concluida su tarea, se disuelva y vuelva a conformarse con otros integrantes, según la naturaleza de cada caso. Al no ponerse de acuerdo, en estos dos temas, esencialmente, es que han decidido bajar de la agenda el asunto. Los miembros de la junta de coordinación política, discuten en cada reunión el tema, pero, han batallado, para llegar a acuerdos. Colunga debe ponerse abusado, porque, de lo contrario, le ganarán el pastel.