*Se acorrientan con la dennisse dresser *Infiernavit a la vista *Para obras el auditor *Se pasan con los de contrato en el hc

TRAEN buen broncón, pero de película, de aquellitas, el sindicato del infonavit y el área administrativa. El arqui Rafael Rivapalacio Pontones y Carlos Martínez, no pueden verse ni por face (antes se decía ni en pintura). Explotó un bombillo entre ambos, hace unos días, por el despido de cinco trabajadores que no se presentaron a laborar. Es que, siguieron las instrucciones de López Gatell, que no fueran, pero eso sirvió para ser lanzados del instituto. O seáse, les dieron permiso para no  ir a laborar en fase 1 y 2, pero en la 3 les obligaron a presentarse, en todo el país, aunque fueran mujeres embarazadas o trabajadores en situación vulnerable. El tema le pegó a Chihuahua porque igualmente aquí se amplió el distanciamiento social entre el sindicato y la autoridad administrativa. Hay que reconocer que el arqui es un dinosaurio de la política y el director de infonavit, Carlos Martínez, un incipiente político, pero con todo el apoyo de la cuatroté. El despido de esos cinco trabajadores irritó al sindicato en todo el país porque, a pesar de que efectivamente faltaron, no había motivo para asistir. Me lleva López Gatell, dijeron los sindicalizados, al conocer el injusto cese de sus compañeros. Las tareas de infonavit fueron consideradas como esenciales, según el decreto, algo que tampoco nadie entiende a carta cabal. El despido llevó a Rivapalacio Pontones a decir que eso demuestra la insensibilidad, la falta de sentido común, el autoritarismo y la política chicharronera de quienes llevan las relaciones laborales y los recursos humanos del infonavit.

CASUALMENTE, al ser cuestionado el auditor superior del estado sobre las obras de remodelación en su área, dijo que se habían cancelado. No todas, porque, aseguró, se sigue con micro obras que no rebasan los 20 mil pesos. Es de mente ágil Héctor Acosta Félix o en cada asunto que ejecuta tiene el plan B para salir por la puerta de emergencia. Sin embargo, se sabe que, efectivamente, existe un presupuesto de tres millones de pesos para remodelar algunas cosillas del inmueble. Argumentó el auditor que recortó ese dinero para enviarlo al fondo de contingencia por el coronavirus al gobierno del estado. Claro que sería cuestión de acreditarlo, pero, aún así, las obras se hacían sin licitar y por un ente autónomo en cuya misión por supuesto no se contempla, ni se permite, la ejecución de obra pública. La auditoría superior de justicia debería haber licitado en forma pública el gasto de esos tres milloncejos como ordena la ley. Pero si ese organismo hace eso cuando es el competente para revisar a los demás en esa misma materia, pues qué se puede esperar de los demás órganos y entes auditados. Todos coludos o todos rabones, pues que les parece si mejor se escoge la opción B y aquí no hay problema para nadie.

EN CUARENTENA y todo, pero el alcalde de Juárez no deja de operar en todos los ámbitos. Así se vio en la designación de Javier Realivázquez como nuevo titular de la comisión estatal de seguridad en la frontera. La designación habla de la buena relación que tiene el edil fronterizo en palacio. Y también la que lleva Emilio García Ruiz, secretario de seguridad pública, con los mandos policiacos en aquella ciudad. Javier Realivázquez es considerado un tipo técnico en cuestiones de seguridad pública. Además tiene una trayectoria honesta y que se sepa no hay mancha en su expediente. Trae escuela en asuntos de seguridad y sabe cómo se mueve el agua en la zona fronteriza. Definitivamente, no puede jalar para su lado cada corporación, menos en una ciudad como Juárez. Deben estar coordinados y no por su rumbo cada agencia de seguridad. Así que, por el bien de la frontera, ojalá y las cosas cambien en ese rubro y se calme la situación de violencia que se mantiene viva de tres años a la fecha. No hay más: deben cerrar filas y parar la delincuencia que azota a las familiares juarenses con los bemoles que el caso amerite.

NO SE entiende, en serio, cómo pueden ser así las autoridades de salud, en este momento. A pesar que de los dientes para afuera dicen reconocer como héroes a los trabajadores de la salud, adentro los patean. Al menos eso dijeron que sienten los del hospital central y los del centro de cancerología. Es que, les prometieron un aumento a manera de bono por riesgo de covid y no les llegó. Luego, reclamaron y les hicieran de agua la mitad, pues en lugar de darles los 3 mil lucas, intentaron partirlo a la mitad como si fuera un bolillo. Para acabarla de amolar, a cambio de pagarles esa micha, deben firmar que en su trabajo no hay riesgo, a pesar que se hallen en el área de pacientes con coronavirus. Es obvio que ya tienen la mira puesta en las demandas laborales pero no deberían tratar así a quienes arriesgan su vida por la de los demás. Son alrededor de cien empleados que no tienen base, obviamente, sobre los que impusieron esas condiciones inhumanas de trabajo. Discriminar en momento de coronavirus, qué barbaridad. A ver si no se le aparece a grajeíta La Planchada para que se  les quite, porque con esa exprimida que le dieron a los enfermeros y empleados de la salud en general, si que se pasaron de tueste.

LOS vecinos de la nueva españa y sus alrededores claman por la presencia de la policía municipal. Todos, en forma impresionante, identifican al malandro del sector, que mantiene azotadas las colonias que hay en las orillas de esa importante vialidad. Un sujeto que al parecer identifican como El Chilas (porque es chilango dicen) ha cometido innumerables delitos. Asalta mujeres, se mete a las casas, comete hurtos y amaga a cuanto transeúnte pasa por el sector. En las redes hasta el domicilio del presunto ponen, para que la policía haga algo al respecto. Pero no es posible que los vecinos vivan en la intranquilidad porque ese sujeto mantenga aterrorizados a los lugareños. Algunos valientes ciudadanos colocaron su fotografía, identificaron por google map la casa donde al parecer vive, señalaron decenas de ilícitos cometidos por El Chilas y, ahora, solo falta que la autoridad haga su parte y vayan por él para que rinda cuentas ante la justicia. A pesar del temor que lógicamente existe, algunos se decidieron a proceder a la denuncia pública. Sigue la actuación de los agentes de la dirección de seguridad pública municipal. O será que El Chilas rifa y controla.

EL HORNO no está para bollos, en serio, y El Paisita con gracejadas que caen como patada de mula a la ciudadanía. La gente reaccionó en serio de mal modo frente a la fotografía que publicó de Denisse Dresser. No sabían si era día de halloween, el famoso truco o travesura, dos de noviembre o un concierto de slipknot con la canción ésa de psychosocial. Como sea, los cibenautas repudiaron en el face la ocurrencia de un gobernador que cada día pierde más la seriedad frente a los chihuahuenses. Aún sus seguidores, porque aunque no se crea, hay uno que otro, no importa que sean bots, se opusieron al modelito. Dresser no es periodista, igual que Corral, y tampoco muy analista que se diga, pero si es especialista en vivir del erario público por medio de sus libritos y sus conferencias. Hay que reconocerlo, un rato tuvo pegue en cdmx pero del 2018 para acá perdió el encanto por  manipuladora y chayotera. Hoy el que la sostiene es El Paisa pero por lo que se mira en redes, el precio es demasiado alto. Las madres de Chihuahua, obviamente, esperarán del gobierno del estado un mensaje serio que, por supuesto, nunca llegará de alguien que ha sido, desde el principio, un personaje frívolo en los asuntos públicos.