Vende La Candelaria artículos religiosos desde hace 150 años

Chihuahua.- La Candelaria, ha dado servicio a Sacerdotes, Religiosas y Laicos desde 1865, convirtiendose en una de las Casa de Artículos Religiosos, con más prestigio en la ciudad de Chihuahua.

El establecimiento inicio hace 150 años, en la Sierra Tarahumara el cual fue fundado por un hombre chihuahuense de apellido Aragón quien visitaba en varias ocasiones esta zona del estado para enmarcar y vender las imágenes de decenas de santos. 

Ramona Castillo Acosta, actual propietaria del negocio religioso, señaló que el fundador viajaba a la sierra con imágenes en su vehículo para enmarcarlas y venderlas a las personas de la zona serrana. 

"El señor al ver que las imágenes enmarcadas tuvieron éxito decidió poner su local a un lado del hotel San Francisco, donde duró más de 125 años, pero posteriormente le fue traspasado a su hija Guadalupe Aragón", expresó. 

Posteriormente Castillo Acosta, narró que la hija del señor Aragón duró varios años a cargo del negocio y decidió traspasárselo a ella hace ya 17 años, debido a varias circunstancias por las que atravesó la familia. 

Actualmente el local se encuentra ubicado en las calles décima y victoria en la colonia centro de la ciudad de Chihuahua, frente al Hotel San Juan. 

"Nuestra amplia línea de productos y servicios, han hecho de nosotros, una de las mejores opciones para la adquisición de artículos religiosos para el culto católico en el estado, ofrecemos cirios, imágenes, rosarios, imágenes de bulto de todos tamaños, oraciones y libros", resaltó la señora Castillo. 

La dueña de La Candelaria, detalló que su establecimiento a lo largo de los años se ha encargado de surtir artículos a iglesias en la ciudad y en la Sierrra, seminarios, colegios católicos, entre los que se encuentran la ESFER Salesianos.

Dentro de los artículos con mayor antigüedad en la tienda se encuentran novenas desde 1891 de santos como El Niño de Atocha, San Lorenzo, Señor San Joaquín, por mencionar algunos.  

Cabe hacer mención que cuando las personas ingresan al local les llama la atención un Cristo de tamaño normal, el cual se encuentra recostado en una mesa, mismo que no se encuentra a la venta, ya que tiene un valor muy significativo para la familia Castillo Acosta.

Por último, la propietaria agregó que la tienda para ella es una manera de evangelizar, una manera de pasar el mensaje de Jesús con el paso de los años, más que un negocio.