Era 7000% arriba de lo normal concentración de gas en alcantarilla

Ciudad Juárez.- Técnicos de la Junta Municipal de Agua y Saneamiento y de Protección Civil encontraron una exagerada concentración de ácido sulfhídrico (H2S) en la alcantarilla donde murieron tres trabajadores el miércoles, ubicada en el cruce de las calles Colegio México y Juan Kepler.

Ante esas concentraciones, la muerte de los tres empleados de la empresa Goco, Pavimentos y Terracerías S.A. de C.V. ocurrió en segundos, explicaron los supervisores.

El detector de atmósfera utilizado en las mediciones determinó que en ese pozo de visita en particular existe una concentración de 700 partes por millón de ácido sulfhídrico, mientras que las alcantarillas adyacentes (distantes de 50 metros hacia ambos lados) concentraban 77 y 10, respectivamente, cuando 10 es el nivel normal de emanación.

Eso confirma que es atípico lo que sucedió en esa cloaca y que terminó con la vida de Rubén Orozco Espino y de los hermanos Víctor y Noé Hernández Alba, de 38, 21 y 20 años de edad, respectivamente.

Los técnicos supusieron que la concentración de ese gas se debe a un taponamiento generado dentro de la tubería del alcantarillado, por lo que extenderán la investigación con cámaras especiales, mencionaron.

Se expuso por parte de los trabajadores de la JMAS que se trataba de un peritaje interno, para determinar las condiciones del colector.

Los empleados de la JMAS aseguraron que pueden meterse sin equipo especial a una alcantarilla cuando el aparato detecte 10 (o menos) partes por millón de ácido sulfhídrico.

Ayer, Norte advirtió sobre un posible peligro en dicho colector, que nace en la avenida Tecnológico y Pedro Rosales de León y termina precisamente en la calle México y Juan Kepler.

Lo anterior con base en las declaraciones de los especialistas de la empresa Goco Pavimentos y Terracería que llegaron el jueves de Torreón para reparar los daños de las familias de los difuntos, quienes externaron que fue una situación anormal lo que llevó a la muerte de sus trabajadores.

Esa versión coincidió con la de familiares de los difuntos, que trabajan también en la reparación de colectores, quienes se extrañan de que los gases concentrados hayan acabado con la vida de los tres trabajadores casi de forma fulminante.

Norte obtuvo la explicación de Andrés Carbajal Casas, experto en la materia, quien incluso habló sobre la posibilidad del riesgo de estallidos, por lo atípico del incidente.

Ayer los técnicos que revisaban la alcantarilla en particular confirmaron lo anormal de la concentración de gases, pero el detector de atmósfera no reveló la presencia de gas explosivo, aseguraron. (Norte Digital)