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Revela incendio de Milano que no funcionan los hidrantes de La Líber

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Chihuahua.- Una grave falla en el sistema de hidrantes en todo el centro de la ciudad quedó expuesta la tarde de ayer durante el voraz incendio que consumió gran parte de la tienda Milano.

Tal como ocurrió hace más de 20 años, el sistema contra incendios en todo el centro de la ciudad resultó inútil, ya que los hidrantes instalados “estratégicamente” no sirvieron en absoluto, ya que el cuerpo de bomberos no pudo utilizarlos.

 
 

El 22 de septiembre de 2006, elementos del cuerpo de Bomberos respondieron al llamado de alerta para sofocar un voraz incendio registrado en uno de los locales comerciales ubicados en las calles Libertad y Tercera. En esa ocasión, el fuego se salió de control, las llamas se extendieron a un segundo local y, debido a ello, dos bomberos, Humberto Acosta Sáenz y Jorge Guzmán, perdieron la vida al colapsar el techo de uno de estos negocios. Además, tres bomberos sufrieron lesiones graves, y el subjefe operativo de la Policía Municipal resultó intoxicado por monóxido de carbono.

Después de esta tragedia, se dieron a conocer los detalles de por qué el fuego se propagó tan rápidamente y no pudo ser controlado a tiempo. La causa fue la falla en el sistema de hidrantes contra incendios en todo el centro de la ciudad, ya que cuando los bomberos abrieron las válvulas para conectar las mangueras, no había agua.

De forma similar, el día de ayer, durante el incendio de la tienda Milano, se reveló que este problema, ocurrido hace 20 años, continúa presente en todo el centro de la ciudad, sin que ninguna autoridad haya puesto atención a este grave problema, que, según los elementos de bomberos y policías municipales, podría convertirse en una inminente bomba de tiempo.

Es increíble creer que fue necesario el uso de al menos diez pipas de agua para abastecer las unidades del heroico cuerpo de Bomberos, dado que de los hidrantes distribuidos en el primer cuadro de la ciudad, al menos tres de ellos, ubicados a pocos metros de la tienda Milano, no sirvieron para nada.

Como referencia, dos hidrantes se encuentran a espaldas de Milano, en el cruce de las calles Victoria y Quinta, y otro más en la misma calle Victoria y Séptima, a tan solo unos metros de donde se encontraba el incendio. Además, otro hidrante, pintado de rojo, que podría haber ayudado, se encuentra en la calle Séptima y Aldama.

 
 

Por la misma calle Victoria y Tercera, hay otro hidrante, y justo en el cruce de la calle Libertad y Tercera, exactamente a unos metros de la placa que recuerda el sacrificio y muerte de los dos bomberos en 2006, se encuentra otro hidrante. Sin embargo, ninguno de ellos pudo ser utilizado.

El colmo de la situación es que esta grave falla se hace aún más evidente al encontrar uno de los hidrantes sin las tapas de bronce que deberían llevar. Este se ubica en el cruce de la calle Aldama y 5ª, a unos metros de las revistas Loya, justo por donde pasaban unidades, agentes, el coordinador de Protección Civil, Julio César Salas, el comandante de Bomberos, e incluso el alcalde Marco Bonilla llegó al lugar, pero nadie dijo nada.

Hay que dejar claro algo: el sistema contra incendios de hidrantes, al menos en el primer cuadro de la ciudad, está obsoleto. Tal vez por eso los encargados de la Casona, ubicada en la avenida Ocampo y Aldama, cubrieron el hidrante instalado en el exterior del restaurante con una maceta, ya que esta adornaba más que la utilidad que le pudieran dar al hidrante.