La Fuente

*Impera la mitomanía oficial *Extrañamiento al TSJ y judicatura *El Reptore se prosterna *Mi General ubicuo

  • Por Editor Bal
*Impera la mitomanía oficial *Extrañamiento al TSJ y judicatura *El Reptore se prosterna *Mi General ubicuo

LA negativa de El Paisa a reconocer que viajó en un avión oficial a Mazatlán y que lo hizo para vacacional en esa playa, debe verse inscrita en la mitomanía oficial que le caracteriza. Es un tema idéntico al de los gastos del famoso Encuentro Chihuahua, a través del cual, gracias a dios, nos sacó del aldeanismo político, según sus propias palabras. Todavía es hora que no sabemos el desglose de los gastos, a pesar que, con la misma enjundia de ahora, Corral prometió mostrarlos a la opinión pública, en un afán de rendición de cuentas y transparencia, que todavía no es hora de ver. Ciertamente, su cantaleta se desgasta cada día más; ésa, de que las críticas emanan de medios afectados por haberles quitado los contratos y las carretadas de dinero. El gobernador debería ya darse cuenta que la responsabilidad de sus actos es suya y no del ex y que el presente no puede ser omiso basado en los yerros del pasado. Hoy jura y perjura que tiene todo para acreditar que no viajó en un avión oficial a Mazatlán, pero, mañana, seguramente, igual esperaremos a que lo pruebe.

SE hizo la machaca en el congreso con la puntilla que les puso la diputada Adriana Fuentes a los del nuevo amanecer. Es que, no se ha ejercido ni un solo cinco de los 55 millones de pesos que pidió el poder judicial del estado. Son los recursos que pidió El Paisa manejar para dárselos a la judicatura, a fin de crear varias salas en Ciudad Juárez e impartir cursos de capacitación. La Güera subió un punto de urgente y obvia resolución, para exhortar al consejo de la judicatura y al tribunal superior de justicia, que se pongan las pilas. Esto no les gustó a los legisladores del nuevo amanecer, porque brincaron de inmediato a responder. Laura Marín, Maribel Hernández, El Jéchu Villarreal y, por supuesto, Blanquita Gámez, pegaron de gritos. A Blanquita la calló Isela Torres al señalar que no es vocera del consejo de la judicatura, aunque tal vez sea una opción para el 2018. Como haya sido, el punto fue votado a favor con algo así como 18 votos a favor y 11 en contra.

YA de veras, en serio, regálenle un paquete de rodilleras de portero a El Parientón, el nunca bien ponderado Reptore, que ya se pasó de tueste. Porque, no tendrá para becas ni le importará el desvío de recursos de los apoyos deportivos, pero sí para complacer a El Paisa. Luisito Fierro ordenó pagar el costo de la inscripción de todos los estudiantes que quisieran participar en la carrera organizada por el gobernador del estado. Y, así como se oye, mandó publicar, con bombo y platillos, el mejor decreto que ha hecho como El Reptore de la mínima casa se estudios. Que solo se anotaran en la coordinación de Actividades Deportivas quienes fueran a participar en la carrera y que, así dice, textualmente, la rectoría se hará cargo de los gastos de inscripción. Algunos catedráticos consideran que debería pagar esos costos de inscripción de su bolsillo, con el abultado salario que percibe, cercano a los 150 mil pesos. Y que, en descargo, debería inscribirse él mismo e irse a correr, que buena falta hace para la salud en general.

MI General es bien generoso cuando de recursos ajenos se trata. Apenas comentamos ayer sobre los funcionarios de la UACh y sus sueldos inmerecidos estratosféricos. La Facultad de Medicina es un caso especial, porque el maestro Hinojos ha seguido fielmente las órdenes de su jefe inmediato César “El Ojo Alegre” Aguilar para quedar bien con el nuevo amanecer. Gracias a las habilidades de éste último, los funcionarios de esa galena facultad hacen uso del don de la ubiquidad y pueden estar ausentes al mismo tiempo en varios empleos. El propio Hinojos, a sus 60 mil pesitos mensuales como director, hay que sumarle 4 quincenas de 14mil por estar trabajando en el mismo horario también en el Hospital General y en el Hospital Infantil bajo el agudo pero tolerante ojo de Mi General. Es el mismo caso del Ojo Alegre, Aleida Medina y Óscar Aguirre que son profesores en la UACh mientras simultáneamente laboran en el Hospital Central en el mismísimo horario, aunque sus alumnos se quejan de nunca tener clases, bajo el argumento de estar trabajando en el Central mientras que no están en el Central, porque tienen que dar clases. Difícil enigma. La secretaria de posgrado de la facultad, Dra Larrinúa, es pediatra en el Infantil a las mismas horas y hasta cobra sueldo también. No hay que ser un genio para admirar a los fieles muchachos que logran omitir el dar resultados en varias partes al mismo tiempo. Curiosamente, tanto el Central como el Infantil son los hospitales que constituyen el mayor dolor de cabeza laboral y político para Mi General, así que tal vez se pasa de generoso cuando paga sueldos a sus esbirros por ser tan ineficientes en calmar las aguas regalando colchoncitos. A menos claro, que la verdadera consigna sea precisamente agitarlas para seguir justificando tanta costosa subrogación al hospital del logo azul.

LOS agentes beta de la dirección de vialidad y tránsito andan que dan lástima, pero los jefes ni sus luces. Traen los pantalones rotos y los zapatos viejos, como diría La Trevi, sin embargo para la institución son invisibles. Quién sabe desde cuando usan la misma ropa de trabajo, porque desde tiempos inmemoriales, visten los mismos desgastados uniformes. El Osito Bimbo, Carlos Reyes, dicen, anda preocupado por construir una imagen a la corporación que le rinda bonos para su anhelada candidatura. El tema es que se preocupa por su candidatura y no por el elemento humano de la dirección. Así que, le hicieron un llamado, anónimo, por supuesto, porque de lo contrario estarían de patitas en la calle, a fin de que voltee a verlos. Al fin y al cabo, si no hay dinero en caja, a pesar del alto ingreso, no sería difícil que consiga un donativo de uniformes.