

Chihuahua.- La Regidora Elena Rojo manifestó su preocupación por lo que considera un intento de criminalizar el derecho a la protesta, luego de la detención del vocero del movimiento Salvemos los Cerros. En sus declaraciones, Rojo destacó que esta estrategia no es un fenómeno aislado, sino parte de una política que ha sido documentada a nivel internacional, particularmente en gobiernos de derecha.
Rojo expresó su desconcierto ante el cuestionamiento hacia quienes participan en el movimiento, enfatizando que la defensa del entorno natural es un tema de interés ciudadano legítimo. “Es simplemente una preocupación real que tiene una parte de la sociedad sobre lo que está pasando con nuestros cerros”, afirmó.
Asimismo, hizo un llamado a la comunidad a observar los cambios en el paisaje del Rejón, donde antes predominaban los cerros y ahora han comenzado a surgir construcciones habitacionales. “No es algo que haya notado yo en lo individual, sino preocupaciones que han expresado muchas personas”, comentó, relatando la tristeza que le causó notar esta transformación en sus recorridos por la zona.
En un mensaje más amplio, Rojo destacó la labor de quienes buscan proteger el entorno, desde acciones de limpieza y reforestación hasta la identificación de espacios naturales en riesgo que podrían convertirse en áreas de recreación. “Hemos olvidado nuestra parte humana y la importancia que tiene nuestro contacto con la tierra”, expresó, advirtiendo sobre los efectos de este descuido en el equilibrio climático y la calidad del aire.
Además, Rojo cuestionó el criterio con el que se otorgan autorizaciones para nuevos fraccionamientos y el uso de suelo en Chihuahua, señalando la necesidad de considerar factores más allá del cumplimiento normativo básico. “No es nada más el hecho de que tal inmobiliaria tiene tal propiedad y se le autorice porque hay agua, porque hay luz”, comentó. Aseguró que es fundamental analizar qué zonas reciben mayor desarrollo y cómo se distribuye la planificación urbana.
Finalmente, Rojo propuso la realización de una asamblea abierta en la plaza pública, donde los colectivos y las autoridades puedan dialogar directamente. Consideró que este espacio de intercambio contribuiría a un mayor entendimiento sobre las preocupaciones ambientales y urbanísticas. “Me dolió que a ese muchacho lo hayan detenido sin ninguna orden de aprehensión, de manera arbitraria”, señaló, enfatizando que la protesta no debe ser criminalizada. También cuestionó la falta de evidencia que vincule a los activistas con las pintas que aparecieron recientemente en la ciudad. “Ojo, no criminalicemos la protesta. No caigamos en esas medidas dictadas desde el exterior”, concluyó.