La Fuente

*Toma Duarte vino tinto francés Petrus *Cada botella cuesta $46 mil y en La Casona $80 mil *¿Facturará al gobierno de estado? *Anda bravo El Fili Terrazas *María Elena Carbajal dice que se amparará vs Ley de Pensiones

  • Por Osbaldo
*Toma Duarte vino tinto francés Petrus *Cada botella cuesta $46 mil y en La Casona $80 mil *¿Facturará al gobierno de estado? *Anda bravo El Fili Terrazas *María Elena Carbajal dice que se amparará vs Ley de Pensiones

EL PASADO fin de semana circuló fuerte la versión sobre el vino que utiliza Duarte en sus comidas en un céntrico restaurante de la ciudad. Los que saben, que de verdad saben, sin agregarle ni quitarle, aseguran que el mandatario de Chihuahua prefiere el vino tinto francés Petrus. Esta marca es elaborada en la región de Burdeos, Francia, y es considerado como el vino tinto más caro del mundo. Puede costar, según información del internet, hasta la cantidad de 4 mil 137 euros, de acuerdo a los catadores que saben de estas cosas.

EN CHIHUAHUA, la botella de Petrus, cosecha 2004, tiene un costo de $46 mil 999 pesos si se adquiere en Cotsco. Empero, si se consume en un restaurante, como el ubicado en pleno centro de la ciudad, cuesta alrededor de 80 mil pesos por botella. Gente cercana a Duarte asegura que el mandatario suele reservar privados para comidas con al menos seis botellas de Petrus. Lo interesante de este dato no es conocer en si los gustos del Gobernador de Chihuahua sino el origen del pago. Es decir, por motivos de la cosa pública, saber si el pago se efectúa del bolsillo personal de Duarte, se factura a las arcas estatales o se cubre por medio de cualquier otra vía. Es todo un caso para transparencia, ¿o no?

EL EDITORIAL publicado por este portal informativo relativo al aumento del Impuesto Sobre Nómina tuvo, hasta el corte de ayer, 234 mil visitas. Tal vez haya llamado la atención por el fundamento de la Objeción de Conciencia. Esta figura, que debería insertarse en la Constitución federal y local, permite no acatar las leyes cuando existen fuertes motivos de conciencia. Y, sobretodo, cuando el examen personal de una ley permite llegar a la conclusión que se trata de un mandamiento jurídico injusto. En este caso, el estado y la Secretaría de Hacienda local, no han fundado ni motivado el incremento al Impuesto Sobre Nómina. Hasta ahora, no han transparentado el ejercicio presupuestal del presente año y, tampoco, han señalado específicamente en qué rubros, programas o acciones, se utilizarían los 715 millones de pesos que captaría el aumento.

A MARÍA Elena Carbajal, la aguerrida lideresa de la asociación de Pensionados y Jubilados del Gobierno del Estado, parece que se le ponchó una llanta. La semana pasada anunció abiertamente que la asociación que dirige se ampararía contra la nueva Ley de Pensiones. Incluso, llegó a expresar, a manera de opinión, que el texto legal era una normatividad “que nos jodió”. Sin embargo, repentinamente, la aguerridísima mujer echó sus gatos a retozar y metió reversa. Simple y sencillamente, se esfumó: ¿a poco le  habrán hecho manita de puerco?

EL FILI Terrazas, delegado de la Profeco, anda así como que echado para adelante en eso de defender a los consumidores. Ayer advirtió a los restauranteros que no permitirá que se la propina sea incluída como cobro. Si no hay la voluntad del comensal, aclaró, ese cobro es ilegal y vamos a sancionar a las empresas. Funcionarios así como éste, dijeron algunos, son los que le hacen falta a la patria para mejorar. Así de sencillo y, por eso, hay que hacerlo Juez o Magistrado para que nos diga de qué color es la piel de dios.

DE TIGRESA a gatita se vio transformarse a la diputada Maru Campos Galván en el caso del aumento al ISN. Primero soltó la garra hacia arriba, como queriendo pelear contra los autores de la fenomenal idea. Luego, dijo haberse convertido en una mediadora entre los empresarios y la Secretaría de Hacienda. Es decir, como por arte de magia olvidó su papel como diputada y miembro de la Comisión de Presupuesto. Tampoco se le pide que se ponga como la senadora Layla Sansores, que la cosa no es para tanto. Pero que, de perdida, dibuje la liebre y que al menos se le vean las orejas entre la maleza.