La Fuente Móvil

LA COMIDA

  • Por Editor R
LA COMIDA

El pomposo Magistrado penalista Gerardo Acosta organizó en Camargo una comida con miembros del nuevo Poder Judicial del Estado. El mensaje, vertido ahí mismo, entre carne asada y tequilón, es que él fue ratificado como vínculo y operario de toda la estructura jurisdiccional. Asistieron a la comilona algunos Magistrados y Jueces, así como otros ingenuos funcionarios que se creyeron la historia de Gerardini. El Magistrado hizo saber indirectamente que ante el vacío de Marcela Herrera, la de lentes de Gatúbela, será él quien ocupe el liderazgo del Tribunal Superior de Justicia en el Estado. Acosta está acostumbrado a amenazar, ordenar y gritar a todo mundo. Como que no le ha caído el veinte de que los tiempos han cambiado y que La Prima ya no está en el mismo edificio. En el TSJ dicen que Gerardo Acosta no es el ajonjolí de todos los moles, sino de todos los males, porque nada más se aparece y empiezan los problemas. Ya ven que, por lo pronto, tiene una denuncia en la UIRA, puesta por el Juez de Parral, al que intentó presionar para que liberara a El Chino Ramírez, y se dice que hay otros juzgadores que están animándose a seguir por el mismo camino.