La Fuente

*El influyente privilegio en la auditoria *Funcionario estatal con auto chueco *De vigencia a vivencia en cedh *Operativo frontón

  • Por Editora NG
*El influyente privilegio en la auditoria *Funcionario estatal con auto chueco *De vigencia a vivencia en cedh *Operativo frontón

EL FEFI hizo el ridículo en la mañanera de este martes, delante de todo el país, solo por intentar una defensa sin fundamento a favor de El Paisa. A base de mentiras, émulo de su patrón, quiso agandallar el tema de la guardia nacional pero le salió el tiro por la culata. Lisa y llanamente, Andrés Manuel López Obrador le dijo que su pregunta estaba basada en una mentira. La guardia nacional no cobrará un peso a los estados, ni a los municipios, por el servicio de seguridad que dará en las distintas zonas del país. Habló en un fantasioso imaginario de una reforma a la ley, totalmente inexistente, que obligaría a estados y municipios a pagar a la nueva institución. Eso les pasa por tomar a ultranza apologías vacías e interesadas, a favor de quien les obliga a hacer trabajitos especiales de corte político. En su vano intento, El Fefi llegó a inventar que ya existe la ley secundaria para regular el actuar de la guardia nacional. Salió con cajas destempladas de palacio nacional, identificado plenamente como un activista de Corral encubierto en la capital del país. Dios los hace… ¡y ellos se identifican!

EL NUEVO auditor superior del estado, Héctor Acosta, aparte de no hacer nada visible, se ha dedicado a engrosar la burocracia, o cómo, dicen los pochos cuando se preguntan algo. Es que una de sus últimas adquisiciones, de corte partidista, obvius, Luis Carlos García, el auto denominado Luisca, se ha dado el lujo de presumir lo que debería no hacerse o en el extremo esconderse. Este funcionario, emanado de las filas de acción nacional, publica en su muro de face cosas que rayan en lo intolerable. Sabrá dios por qué goza de esos privilegios y habría que preguntarle a su jefe los motivos del lobo, pero no deja de llamar la atención. Luis Carlos empezó a trabajar en diciembre, a finales, en la auditoría superior del estado y ya se tomó, en esta época, precisamente, una semanota de vacaciones. Esos períodos de descanso en serio no los tiene ni Obama, pero el joven funcionario, sin importar la ley, la antigüedad, los derechos laborales, agarró su maleta y peló para la playa. A lo mejor es muy eficiente y nadie lo sabe o tal vez hace trabajos que los demás no atinan, sabrá dios, pero de que tiene privilegios, dicen los de adentro, los tiene. No sean envidiosos, apenas fue a playa del Carmen, donde la vida se vive en dólares.

TREMENDO El Bigotón José Luis Armendáriz, que en la comisión estatal de derechos humanos hizo un vino, vio y venció, al estilo romano. Sin lugar a dudas, su largo paso por la institución dejará huella en el estado de Chihuahua. Se le metió a Reyes, se sostuvo con Duarte, le aguantó a Corral y todavía le dejó encargo los próximos cuatro años. Armendáriz hizo un video con ademanes de menge tibetano para agradecer a todo mundo su estancia en la institución y también dejó la víbora chillando con una frase que cala. Pasar de la vigencia a la vivencia de los derechos humanos, ahí le hablan a mi paisa, pues efectivamente todo ese asunto es solamente tema de discurso pero no de acción. Y todos sabemos que es el estado el que viola los derechos humanos de los ciudadanos, es decir, la autoridad, los policías, los agentes del mp, los funcionarios prepotentes y soberbios que están en el gabinete y toda esa raza que se siente bañada en oro puro por trabajar en el gobierno y ostentar un poquito de autoridad. Casi todos ésos se parecen al cantante Rafael en concierto cuando estrella una copa en el piso y se sale del escenario. Pero, en fin, Armendáriz constituye un ejemplo digno de resaltar y su paso por la cedh bien puede resumirse así, a manera de epitafio político: hizo todo cuanto le dejaron hacer, sin despeinarse el bigote.

LA GENTE que habitualmente acude a las instalaciones de La Deportiva anda espantada y no es por la temporada de las películas de terror del mundo católico. Es por el impresionante operativo de seguridad que mantiene tomada la zona un día sí y otro no durante horas enteras. NO es que El Apá ande a la cacería de poderosos narcos o que por fin atrapen a los vendedores de chiva. No, el motivo de que seis camionetas de lujo repletas de escoltas y guardias es que El Paisa se avienta una cascarita de frontón en el lugar. El Capitán Escamilla, su fiel escudero, vestido a la usanza deportiva, al igual que Panchito Muñoz, que siempre llega tarde, acompañaron este martes a Corral. Mientras tanto, todo el gabinete estatal esperaba al jefe en el salón rojo de palacio para desarrollar una reunión de trabajo. Incluso Agustin Basave, que ya no está para esos trotes y cabecea en las juntas pero que le hizo venir estos días el gobernador. Así que en las mañanas en la deportiva y en las tardes y fin de semana en El Campestre o en el San Francisco. Entonces si el jefe lo hace, todos a reverse la teté et profite de la vié.

LOS VECINOS de Pako Lozano, en serio, están hartos de su prepotencia, pues el funcionario estatal se siente la divina garza. Aparte, cree que por ser parte de la secretaría técnica del gobernador, ay-ay, puede hasta violar las leyes. De otro modo no puede entenderse cómo circula en un vehículo chueco, sin placas, cuando el discurso de su patrón apunta a la legalidad. Mientras la fiscalía amenaza con desposeer a los dueños de chuecos de su unidad, Pakito Lozano hunde el acelerador hasta el fondo en su poderoso importado sin papeles. A todo mundo presume que es muy cercano a Corral y se siente el uyuyuy del barrio. Que le pagan muy bien, que llega a la hora que quiere y que no hace nada de ocho de la mañana a ocho de la noche.  O sea, como el del video aquél, en la mañana no hace nada y en las tardes descansa, pero a éste si le pagan y con impuestos. Además se siente intocable por eso circula con su carro chueco sin preocupación alguna de que la policía vial o agentes de la CES de El Apá se lo vayan a decomisar. Para colmo de males, asegura que ni El Menordomo, Panchito Muñoz, el que convierte por arte de magia la cerveza en jugo de naranja, truco que solo puede hacer en palacio de gobierno, le dice nada.