La Fuente Móvil

EL DEDULCE

  • Por Editor R
EL DEDULCE

Es Gilberto Loya, el Secretario de Seguridad Pública, el que se trenzó en pleito contra el Fiscal Roberto Fierro. Nadie debe asustarse con esto porque basta recordar los agarrones de miedo que se daba Raúl Grajeda con la Procuradora Patricia Rodríguez en los tiempos de Reyes Baeza cuando se creó la famosa Secretaría que después desapareció Duarte y revivió La Corraleja. O seáse, en el fondo es una lucha de poder que versa sobre el acaparamiento de los órganos de seguridad y procuración de justicia. Gilberto no tarda en irse con todo y chivas a instalar el mando en Ciudad Juárez, como le ordenaron, después de haber rechazado cien millones de pesos para levantar en la ciudad de Chihuahua un edificio de ocho pisos. Propuso una reforma a la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo, porque la SSPE no la tiene, para arrancarle a Fiscalía órganos vitales. Pero desde antes, le habían entregado a un Fierro fortalecido el sistema penitenciario y se había quedado con el Instituto de Formación. A Loya le darán una División de éste último para capacitar a los policías estatales y el Secretariado del Sistema Estatal de Seguridad Pública. Con esto deben aquietarse las aguas, no vaya a ser que los chanateen, porque recuérdese que en este momento cualquier funcionario es sustituible. El que quiera ser Fiscal, es muy simple, que estudie Derecho y se aprenda a fondo el Artículo 21 Constitucional porque ahí radica el quid de este asunto. El Fiscal tomó clases en el FBI y Gilberto tiene una vasta experiencia en la Policía Municipal, así que se verían muy bien sumando esfuerzos, en lugar de dar espectáculos fuera de base.