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Fíchalo, fíchalo, gritaba corral a su escolta, fuera de sí

Chihuahua.- Fíchalo, fíchalo, le gritó a Gabriel Venzor, El Pato, fuera de sus casillas, con el gesto descompuesto por la ira, Corral. Dos guardias sujetaron fuertemente por los brazos al reportero...
  • Por Redacción1

Chihuahua.- Fíchalo, fíchalo, le gritó a un guardia, fuera de sus casillas, con el gesto descompuesto por la ira, Corral.

Dos guardias sujetaron fuertemente por los brazos al reportero de La Opción de Chihuahua, Gabriel Venzor.

Gabriel estaba a tres metros del mandatario, separado por la malla, afuera de la cancha número cuatro de tenis de la deportiva.

Corral estaba adentro y Escamilla, con su prominente vientre, estaba igualmente en la parte interior.

Otro escolta le arrebató el celular, después de escuchar al gobernador gritar: chécame a este cabrón, chécame a este cabrón, es del narco.

Un cuarto escolta del titular del poder ejecutivo, le empezó a hacer preguntas:

¿Díme la verdad para quién trabajas?

¿Qué andas haciendo aquí?

¿Por qué le estás tomando fotos al gobernador?

Un quinto policía grababa todo el interrogatorio con un teléfono celular.

Le tomaron fotos de frente y le obligaron a ponerse de perfil para hacer otras tomas. Del lado derecho, luego el izquierdo.

De ahí se fueron a revisar el vehículo march de este portal informativo y, después, le dejaron ir.

Pero el teléfono celular, nunca se lo entregaron. Entraron a revisar los chats de los reporteros locales como una forma de espiar.

Luego, apagaron el aparato, unas dos o tres horas después.

Venzor recuerda este episodio este lunes, dos días después del incidente, durante un recorrido por la deportiva en compañía del director de La Opción de Chihuahua.

Fue una especie de reconstrucción de los hechos en los cuales el gobernador perdió los estribos y habló incoherencias inadmisibles en un mandatario.

Durante el recorrido, se pudo constatar que la deportiva no tiene cámaras de vigilancia.

Los guardias, entrevistados en el anonimato, señalaron que los radios con que trabajan no funcionan y tampoco tienen teléfonos para comunicarse con sus superiores.

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