*Con el diablo adentro en la depor *Repudian el negocio privado de corral *Fue El Dirty Ochoa *Run rún cita a Eugenio Baeza

LA GENTE de los alrededores de la deportiva anda endiablada con eso de privatizar las canchas de basquetbol. No tiene moúser esa política pública en un espacio que es de todos los chihuahuenses. Es increíble que el señor gobernador haya tomado la decisión de suprimir el libre acceso a esas canchas. Cuándo podrán entender nuestros políticos la notable diferencia entre ser mandatario o propietario de algún bien. Cuál será la razón de distorsionar el sentido de las facultades que las leyes les asignan para ejercerlas a su personalísimo modo de ser. Es mucho pedir para un político que, jamás había administrado un peso de dinero público y que, lógicamente, ahora está engolosinado por el grueso del erario. Igual anda con ese proyecto en El Chamizal de Ciudad Juárez, las canchas de tenis también en la deportiva y al rato en los retenes o en los semáforos. Qué tristeza descubrir que, después de décadas de supuesta y demagógica lucha por la democracia, aflora el verdadero ser del tirano al que le encanta la pleitesía y los viáticos, así como los negocios hechos en espacios públicos a partir de la fuerza del poder. Qué barbaridad.

TEMA aparte constituye el fondo del conflicto, es decir, el contenido de la ley de transporte de Corral. Los concesionarios se unieron –Doroteo Zapata y El Guerito Lozoya, por ejemplo- porque si fuera aprobada, les cambiaría la vida. De golpe y porrazo, sin consulta ni diálogo, el gobernador plantea prohibir la inveterada consuetudo en el derecho de los transportistas: prohibirles heredar a sus hijos las concesiones de los camiones. Ese sólo punto, sin necesidad de leer una letra más del proyecto de ley, basta para haberse echado encima a todo el llamado pulpo camionero. Corral piensa que con eso arreglaría el problema del transporte, pero es muy probable que lo haría peor, sin ánimo de defender a los gremios. El tema es que si las concesiones duraran 15 años, nadie le metería un quinto a la mejora de las unidades, por ejemplo. Con leyes, visto está en nuestra cultura, no se cambia la realidad, porque ésta no se modifica a través de un decreto. Todos los gobernadores anteriores han tenido la misma tentación y ninguno pudo cambiar las cosas para bien del servicio y de la sociedad. Y hacerlo en el penúltimo año de su gobierno, realmente parece un despropósito, muy alejado de la realidad y de ser un logro. Da la impresión que el gobernador solo quiere la foto para correr a cdmx a decir que resolvió el problema del transporte en Chihuahua.

YA se supo que fue El Dirty Ochoa, quien puso el lodo innecesariamente en el proceso electivo de la cámara de comercio. Edibray Gómez pudo alzarse con la victoria sin necesidad de recurrir a esos manejos, pero el ex presidente de la cámara ya había metido sus sucias manos. Gómez se había ausentado por motivos de salud esos días, que aprovechó Maurilio Ochoa Millán para rondar la canaco y efectuar esos manejos. Por eso salieron un minuto antes de la elección con que descalificaban la planilla de Moisés Arévalo. Así pues, no podrían siquiera saber cuántos votos hubiera obtenido si se hubiera llevado a cabo el sufragio de los comerciantes organizados. Efectuaron la declaratoria del triunfo de Edibray sin planilla opositora y a esperar, en su caso, la impugnación por la vía jurídica. La relección de un presidente de la canaco es generalmente algo ordinario, pues casi se toma como un hecho consumado. No hay memoria que alguien la haya perdido en décadas enteras. Incluso Moisés Arévalo sabía que emprendía una misión casi imposible. Pero, El Dirty Ochoa, con su inefable protagonismo, debía salir con su domingo siete. Ni pex.

DICEN que el pasado fin de semana empezó a sonar fuerte el run-rún de que Eugenio Baeza, El Shá de Irán, quiere ser candidato a la alcaldía. Esto rompe con su propia declaración, efectuada en aquella presentación de su libro, donde dijo que buscaría ser alcalde, pero por el pri. El tema es que ahora podría ser candidato pero por la vía independiente, para retomar el proyecto que empezó El Wolverine Luis Enrique Terrazas y que en una de ésas le pega. A Luis Enrique no le fue nada mal, pues consiguió en aquella ocasión meter tres o cuatro regidores. Hizo una campaña limpia, honesta, abierta, empática, con ideas realmente innovadoras, pero chihuahuita land, reacia, como siempre a lo liberal, se dejó llevar, como mi general Ávila, por la ortodoxia política. Mister Bafar no es el señor de las simpatías, cierto, ni lo será, pero es un tipo atrevido y arrojado, que tiene fama en el mundo empresarial de conseguir sus metas. Eugenio está muy confrontado aún con El Paisa por el tema del fideicomiso del centro, ya ven que en una reciente rueda de prensa le balconearon ese asunto y ahora resulta que es el dueño de la súper alberca que se hizo en el sitio. Tal vez y el mensaje haya salido por ese motivo, no se sabe, pero como dicen que en política no hay casualidades, pues ahí se la echan. 

EL AUTORITARISMO no puede conducir más que a la protesta, sobretodo cuando el gobierno que lo ejerce se encuentra en un año crítico. Y más cuando se trata de los concesionarios del transporte, que desde tiempos inmemoriales, han generalmente dominado a los gobernantes. El Guerito Lozoya es hoy el líder que asoma la cabeza, igual como en otros sexenios lo fueron otros. Corral debió ejercer el poder con los concesionarios el primer año de su administración, no el cuarto, así que, este solo motivo, constituye una advertencia para su derrota. Tal vez se le haya olvidado que ese mismo jueguito le hicieron a duarte al final de su mandato, que ya lo tienen muy bien ensayado y que conocen como la palma de su mano los puntos débiles de los gobernadores. Por lo pronto, el mandatario hizo lo que ni Zapata pudo: unir los distintos grupos de los concesionarios del transporte. Le será difícil resolver el entuerto, más cuando Luis Fernando Mesta, la verdad de las cosas, no ayudó mucho en el tema al reunirse con ellos. No se asustan con unos golpecitos sobre la mesa ni con unos cuantos gritos. El tema es que les prometieron participar, hablar y ser escuchados y no lo hicieron, pues intentaron el frío madruguete que al final resultó fallido.

EL CABALLO Lozoya se metió de lleno en el tema de las afectaciones del SAT a los trabajadores de la maquiladora APTIV. En Parral hay 2 mil 300 empleados, de un universo estatal de 17 mil 300, pero al parecer es el único edil que ha asumido esa defensa. El presidente municipal, inquieto como es, a todo galope, le dio un entre al asunto y se fue incluso hasta la frontera norte, donde hay miles de trabajadores más de esa empresa. Se sabe que por estos días sostuvo contacto con Alejandro Quiroz, presidente de APTIV Latinoamérica, para diseñar una estrategia conjunta que los lleve a pedir al sistema de administración tributaria adecuaciones para no lastimar el ingreso de sus trabajadores. Hay que darle seguimiento a este tema porque ha pegado fuerte en la economía laboral y ningún político administrador se había interesado en ayudarle al gremio. A los empleados de la maquiladora poco les interesará el proyecto político de Alfredo Lozoya si éste les consigue el regreso de esa merma. Pero de hacerlo, pues estarán puestos con el edil cuando sea el momento, de acuerdo con el momento que se viva en la entidad.