[¿Ni están todos los que son ni son todos los que están?]

Dicen que en la balacera que ocurrió ayer afuera del cereso de Aquiles, que dejó saldo oficial de tres muertos y un herido, las autoridades están ocultando bastante información.

Desde que inició el asunto se dijo que había dos policías del Municipio de Chihuahua metidos en el rollo, pero al final resultó que solo era uno, bueno, al menos es lo que finalmente la Fiscalía General del Estado dio a conocer de manera oficial, mientras que la Municipal no ha dicho ni “pio”.

También trascendió que los custodios de la caseta al ver la balacera accionaron sus armas de fuego y fueron ellos quienes auxiliaron y detuvieron a uno de los involucrados que había resultado herido y, quien dicen, es el agente municipal de Chihuahua que participó en la balacera.

Por cierto, Jorge Armendáriz, vocero de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, anunció primero que había un muerto, un herido; “tenemos dos personas detenidas responsables de este hecho, así como el aseguramiento de tres armas de fuego”. ¿Dónde estará esos detenidos?

También dijo el vocero que el hecho no tenía nada que ver con el sistema penitenciario y que la balacera ocurrió, según él, en el entronque al cereso y, aclaró, que es una carretera que no solo va al centro penitenciario sino también a otras colonias, cuando la realidad es que el enfrentamiento fue como quien dice en las puertas del reclusorio. Posiblemente el funcionario estaba un poco mal informado. ¿Será?   

El asunto es que hay muchos cabos sueltos en este topón, por ejemplo. ¿Quién les informo a los malandros que esperaban a que saliera el reo iba a ser liberado? ¿Qué andaba haciendo el policía Municipal de Chihuahua con su arma de cargo en el municipio vecino? ¿Su jefe inmediato estaba enterado? Solo falta que digan que estaba jalando de DiDi en la camioneta Durango y que fue por un viaje. Así las cosas.